Con el correr de los años, a medida que fue construyendo su carrera, supo adecuarse a los diferentes momentos que le tocó vivir profesionalmente. Demostrando que es mucho más que una cara bonita, Noelia Marzol (32), que creció bajo el ala de Marley para dar sus primeros pasos, ya tiene vuelo propio. Con el papá de Mirko lograron ser una dupla infalible. Esa química, que empezó a dar sus frutos allá por el 2010 en 3,2,1… ¡a ganar! sigue latente hoy, en Minuto para ganar, el programa de juegos que se emite por Telefe.
“La primera vez que me eligieron fue gracias a él. Fue él quien marcó mi nombre en un casting y me bancó en todo momento para que pudiera estar. Fue la persona que confió en mí en todo momento, y por eso le voy a estar agradecida toda la vida. Para Minuto para ganar fue distinto, directamente me convocaron y ya”, cuenta Noelia.
–¿Cómo es trabajar con él?
–Hacer dupla con Marley es lo mejor que me puede pasar. Más allá de que llevábamos unos años sin trabajar juntos, siempre mantuvimos la relación de amistad. Tenemos códigos, digamos que estamos en la misma frecuencia, y eso el público lo percibe. Me da libertad, me deja cargarlo en la misma medida que él me carga a mí, es todo muy relajado, como también hacerlo en Telefe, el canal en el que empecé. Por suerte la gente elige el programa, y eso siempre es reconfortante. Con mucha energía y positividad.
–¿Cómo hacés para mantener la figura?
–Soy adicta al chocolate y a las cosas dulces en general. Me paso comiendo ese tipo de golosinas todo el día. Estoy haciendo Bien Argentino, donde tengo muchos cuadros bailando, y eso me ayuda a bajar las calorías de más. Con las dos funciones de cada día me alcanza, no estoy haciendo entrenamiento extra. Cuando no hago teatro, que es un mes al año, me gusta hacer mucho deporte, no voy al gimnasio porque me aburro mucho, por eso elijo deportes acuáticos, como wakeboard, surf… No me tomo el deporte como una actividad para mantener el físico, sino como algo que me divierte y me gusta, por eso puedo estar horas y horas.
–Además de modelo y conductora sos actriz, ¿te gustaría desarrollar más esa parte artística?
–Sí, por supuesto. Es algo que me encanta y siempre estoy abierta. Este año estuve como coprotagonista en Millennials y me encantó. Es un trabajo súper duro y que hay que tomárselo con mucha responsabilidad. Son muchas horas, muy duro, pero es una de las cosas que más me gustan hacer, sin dudas.
–Tuviste muchas escenas de sexo, ¿te mentalizás distinto en ese momento?
–No, para nada. Son como cualquier otra escena. Obviamente que te da un poco más de pudor porque estás expuesta físicamente, pero la dinámica no cambia. Básicamente, lo que uno está haciendo es actuar, no es más que fingir una situación. Más allá del pudor, no es algo que me incomode o que lo padezca.
–A raíz del caso Darthés, ¿sentís que son distintas estas situaciones?
–Siempre hablamos con los actores con los que me tocó hacer escenas de sexo, con las chicas también, con Laura Laprida y Yoyi Francella, y coincidimos en que esta generación nueva de actores tiene un respeto muy grande por la mujer, cosa que tal vez antes no existía. Están informados de todo y nunca nos sentimos incómodas.
–¿Se habla del tema cada vez que surgen estas escenas?
–Sí, los chicos siempre se ocuparon de que estemos cómodas, así como nosotras nos ocupamos de ellos. Antes de las escenas se habla sobre cuál es el límite, qué cosas se pueden hacer, qué no… hasta después de las escenas hablamos para que no haya malos entendidos ni nada. Es muy diferente a cómo se trabajaba antes.
–¿Cómo anda el corazón?
–Si te referís a si estoy de novia, no… no estoy de novia. Primero quiero aclarar que no nos separamos porque yo hablé de infidelidad en mis anteriores relaciones. Pasa que seguimos siendo machistas y garpa más eso que la verdad.
–¿Nada de nada?
–Desde que me separé de Marcos, mi ex, no volví a estar con nadie… Sí es verdad que desde hace unos días nos volvimos a ver con él, la intención es tener algún tipo de vínculo amoroso, pero bueno, tiempo al tiempo. Veremos si podemos reflotar la relación que alguna vez tuvimos.
¡Picante! Hace un tiempo, Noe contó cual fue la peor cita de su vida, que se la arregló... ¡Marley! ¡Dale play!
La rubia abrió su corazón para Marcos, su novio cordobés.
Noe reconoce que vive sola en un barrio cerrado.
El es el galán cordobés de Marzol.
Noe tiene uno de los mejores cuerpos de nuestro país.
Ella reconoce ser muy amiga de Marley.
