1. La presión, ¿saca de usted lo mejor o lo peor?
–Saca una fuerza que no sabía que tenía. Si fuese por mí, no trabajaría más, pero también siento que el laburo me hace sentir útil.
2. ¿Qué imagen le devuelve el espejo?
–La de una mujer triste. No lucho contra esa imagen porque aún no tengo fuerzas necesarias para luchar.
3. Normalmente, ¿piensa todo lo que dice?
–No. Digo todo lo que pienso y eso me trae muchas complicaciones. Soy políticamente incorrecta. Por ejemplo, si alguien me parece un pelotudo, se lo digo con todas las letras. Mi lengua es más rápida que mi cerebro. Lo que siento, lo largo.
4. ¿Qué le sorprende de usted misma?
–La fuerza y la voluntad que le pongo a todo. Durante varias horas al día me siento muerta y al rato ensayo como loca. Siento que vivo en una resurrección permanente.
5. ¿Qué la rescata de la tristeza?
–La sonrisa de Thiago, ver feliz a Barbie y Gonzalo, estar los cuatro mirando una peli en la cama. Esas cosas simples.
6. ¿Ha intentado ser una esposa ejemplar, una amante maravillosa, una gran hermana y una madre única?
–Nunca intenté ser una amante maravillosa, porque no soy muy sexual. A eso, no le metí mucha onda, ¡pobre Fabián! Soy de las que te dicen: “Rapidito, papi, que tengo sueño”. Siempre me preocupé por ser todo lo demás. Siento que lo de ser mamá me sale muy bien Sin pecar de soberbia, como mamá y como hermana me pongo un diez. Como esposa no me fue bien, me separé dos veces.
7. ¿Alguna vez sintió que le arruinaba la vida a alguien?
–Sí, pero no pude hacer nada para repararlo. También sentí que la misma persona a la que le arruiné la vida, me arruinaba la vida a mí. Siento que Fabián se mató por mi culpa. Si bien me amaba demasiado, él me arruinó la vida porque no tuvo los huevos para decirme: “Loca, me pasa tal cosa”. Nunca me contó lo que pasaba. Creo que él pensaba que si me lo decía nos íbamos a separar, ya que la deuda es multimillonaria. Yo me iba a enojar, pero lo iba a bancar. Igual no lo culpo, pobrecito.
8. Hacer pública su vida privada, ¿es el precio más caro que pagó por ser famosa?
–Es posible, pero no sé caretear. Todos dicen que a la gente del medio se la come el personaje. A mí me comió la persona. Yo soy una mina que labura de esto. Bajo del escenario y soy lo que se ve. No tengo mucho más para mostrar. Sólo vivo para mis hijos.
9. ¿De qué se arrepiente?
–Quizá de no haberme podido armar el personaje para caretearla, pero la verdad es que, después de lo que me pasó, me chupa un huevo.
10. Un pequeño secreto para ser feliz.
–Saber que la vida no es perfecta y tratar de disfrutar el hoy. No planear tanto, porque no sirve para un carajo.
