A medida que el tiempo pasa y los artistas van creciendo en sus talentos, hay un costado místico que causa mucho interés. La que esta vez se encuentra en el foco de atención es María Becerra, de quien su carta astral indica que tiene una cabeza muy adelantada por haber nacido durante el Sol en Acuario.
Desde muy joven es que María tenía un talento que desarrolló en un principio en las redes y que luego la fue insertando en la música. Con un paradigma nuevo y dispuesta a abordar desafíos, Urano hoy pasa a ser lo flamante y plantea diferentes escenarios.
Lo primero que se destaca en esto es la transformación y los cambios; el hecho de poder romper lo preestablecido, escaparse de los esquemas y animarse a plantear otras realidades dentro de la vida, es la gran capacidad que se puede observar. No obstante, para poder avanzar e ir por más hay una cualidad que cumplir.
Mirá También
El mal momento de María Becerra en un show de Bolivia: se descompensó y tuvo que ser asistida
Dejar atrás todo lo viejo pasa para construir es a lo que se apunta; resumidamente eso es Becerra con su personalidad. Con Sol en Acuario y Luna en Tauro, lo que se señala es que María tiene la capacidad de poder dar con sus sentimientos más profundos, lo que hace generarle grandes éxitos en la música.
QUÉ SE LEE EN LA CARTA ASTRAL DE MARÍA BECERRA
Aquí se da una especial participación de Mercurio en Piscis, lo cual se relaciona con la comunicación y el comercio. Esto fue el impulso principal que tuvo María para durante su adolescencia y poder desarrollarse en un camino musical que hoy es totalmente exitoso.
Claro que el haber congeniado que está en una época de tecnologías avanzadas y con herramientas muy importantes que la ayudaron a crecer, para ella fue un eslabón importante. Pero un dato a tener en cuenta es la cara que oculta la carta astral de Becerra.
En dos escenarios diferentes, se encuentra Marte en Aries y en otro Saturno en Tauro. Esto es tiene un espíritu insatisfecho y rebelde; nunca se está de acuerdo con lo que se consigue ni tampoco termina de satisfacer, lo cual lleva a que permanentemente se redoblen los esfuerzos.
Mirá También
