Hace diez meses su vida cambió por completo. El 5 de noviembre de 2018, Débora D’Amato (46) dio a luz a Lola, su primogénita. Siendo madre soltera, la periodista empezó a dar pasos y a conocer este camino que siempre quiso transitar. Con el correr de los meses madre e hija se hicieron compinches para disfrutarse mutuamente. Fue un año intenso desde lo emocional y laboral.
Por eso, la panelista de Intrusos decidió tomarse un descanso para encarar lo que resta de este 2019 con energía, renovada y siempre con el buen humor que la caracteriza. El lugar elegido fue Florida y, si bien hubo temor por lo que podía pasar con el huracán Dorian, afortunadamente madre e hija pudieron disfrutar de unos días lejos de la rutina.
–¿El viaje combinó trabajo y placer?
–Sí, mi amiga Pany Chama trajo la obra Invitro a Miami. Debíamos viajar el domingo, pero con el tema del huracán Dorian la aerolínea nos sugirió que adelantáramos el vuelo dos días porque iban a suspender otros. La obra es sobre el camino a la fertilidad asistida en primera persona, y yo hago una participación especial con una carta a mi hija que narra un poco mi experiencia y brinda esperanza a aquellas mujeres que están en ese camino. A mi regreso de este sueño tengo más vacaciones pendientes, que serán para ocuparme de algunos asuntos postergados y arreglos que tengo que hacer en casa.
–¿El huracán te afectó en algo?
–Prácticamente no pasó por Florida. El caos y la desgracia fueron en Bahamas. Miami tuvo un par de típicas tormentas tropicales, de esas que se vuela todo, llueve y sale el sol. Los amigos que tengo acá siempre me tranquilizaron para que viajemos sin problemas, y a las pruebas me remito, todo en orden.
–¿Lola pudo conocer el mar?
–Los primeros dos días estuvo con energía de más, porque su rutina diaria se alteró, era otra. Pero al día tres volvió a ser la nena tranquila de siempre. Le encantó la arena, el agua, todo. Es la primera vez que va a la playa, y le encantó. Disfruta de todo siempre, soy una afortunada.
–¿Cómo vivís la maternidad, ahora que la nena ya tiene diez meses?
–Los cumplió acá, en Miami. Es increíble lo grande que la veo. Camina sin parar, es una cosa de locos lo activa que es. Acá, entre su energía desbordante, el mar, el viento y la arena, duerme mejor que nunca. Siesta a media mañana, a media tarde… hasta se duerme en el agua. Es una fiesta vivir con ella.
–¿Te gustaría darle un hermanito?
–Me encantaría tener otro, pero soy responsable y sería una locura. Mi casa la mantengo yo y a mi hija la crío yo. Sería una irresponsabilidad tener otro bebé, aunque me encantaría. En este momento no lo veo posible por un abanico infinito de cuestiones.
–¿Estás en pareja o algo por el estilo?
–No hay novio ni touch and go. Me hacen reír cuando me dicen que no me olvide de ser mujer, creyendo que la maternidad te quita ese rol. En este momento mi energía, mi atención y mi corazón miran para un lado solo y mide 73 cm, pesa 8 kilos y medio y se llama Lola. Me da plena felicidad nuestro día a día. No estoy cerrada a la posibilidad de enamorarme y ojalá eso llegue, porque es un lindo estado; pero en este momento no hay nadie que me quite el sueño, ni siquiera un ratito.
