Son cuñadas, es cierto, pero no tienen relación. O lo que es peor: está quebrada, rota, deshecha y -aparentemente- sin vuelta atrás. Así es el vínculo que tienen Ivana Icardi y la esposa de su hermano Mauro, Wanda Nara (32). Y si bien tuvieron una etapa de peleas mediáticas, también es cierto que después se calmaron y dejaron de tirarse con munición pesada. Hasta ahora…
Es que sus haters comenzaron a acusarla en las redes de hablar mal hasta de su propia familia. Ni lerda ni perezosa, la ex Gran Hermano arremetió contra ellos, que hoy se mueven entre París y Milano. “Para los que dicen que hablé mal de mi familia: Para mí, mi cuñada no es mi familia así que les sale mal la jugada. Además, de todo lo que dije el tiempo me dio la razón. Ahora pueden seguir participando", lanzó ácida en su cuenta de Twitter.
“De mí y mi ex pareja tampoco pueden decir nada porque al contrario de los descerebrados y gente tóxica que hay por ahí y que creen que nos tenemos que odiar, nos respetamos, hemos seguido en contacto y hasta hemos comido juntos”, sumó la modelo y sumó a Luifa Galesio a los reclamos.
Recordemos que la muchacha acusa a Wanda de ser la responsable del alejamiento del futbolista del Paris Saint Germain de su familia y de que sólo le importan la plata y las apariencias. Por eso, el jugador salió con los tapones de punta a responderle a su hermana defendiendo a su esposa y mánager.
"Mejor preocupate por ocupar el tiempo que desperdiciás con pavadas en trabajar", dijo, lo que llevó a su hermana a bajar el perfil, aunque parece que no lo logró del todo.