No todo es brillo y glamour en el cuerpo de Kim Kardashian West, que está pasando un momento de salud muy complicado.
No sólo contó hace muy poco contó que unos análisis le dieron positivo para lupus lo que no significa que haya desarrollado la enfermedad, ahora contó cómo lucha contra la psoriasis y la artritis.
Primero publicó una selfie sin maquillaje en su storie de Instagram, donde se ven las marcas rojas características de la psoriasis.
La psoriasis es una afección de la piel que causa manchas rojas, escamosas y con costras y escamas que se relaciona con problemas con el sistema inmunológico.
La selfie de Kim tenía un link a un artículo que escribió para su web de estilo y lifestyle Poosh.
En el artículo, Kim comparte cómo es vivir con psoriasis y cómo aprendió a lidiar con ella.
También se abre sobre el diagnóstico de otra afección autoinmune, la artritis psoriásica, un tipo de artritis que se desarrolla en personas que ya tienen psoriasis.
"Aunque siempre crecí con mi madre con psoriasis y escuchándola hablar sobre su lucha, realmente no tenía idea de cómo sería mi vida lidiando con una enfermedad autoinmune”.
Kim revela que tenía 25 años cuando tuvo su primer brote de psoriasis y cómo cualquier resfriado le dispara las manchas en la piel.
Además la empresaria incluyó fotos de las marcas que ha tenido y contó que después de una inyección de cortisona de un dermatólogo, su psoriasis "desapareció por completo durante unos cinco años".
Sin embargo, luego regresó cuando tenía poco más de treinta años, y es cuando Kim asegura que "comenzó su verdadero viaje de psoriasis”.
"Aprendí a vivir con esto sin usar cremas ni medicamentos. Solo trato. A veces lo cubro y otras no. Realmente no me molesta".
Kim luego explica cómo fue diagnosticada con artritis psoriásica: "Una noche, me desperté para ir al baño y no podía ni levantar el teléfono”.
Para la influencer el dolor era insoportable y lo sentía en los huesos, y que un día tuvo que pedir ayuda para vestirse.
“Con las botas que llevaba, mis tobillos comenzaron a sentirlo en esas articulaciones. Fue entonces cuando supe que no era solo un dolor”.
Pero Kim asegura que ha aprendido a vivir con sus dolencias.
”Si tienes psoriasis, no puedes dejar que arruine tu vida o que te saque lo mejor de ti".
Y finaliza "Espero que mi historia pueda ayudar a cualquier persona con una enfermedad autoinmune a sentirse segura de que hay luz al final del túnel".