Lucía Celasco siempre ha estado en boca de todos desde pequeña. Hija de Mercedes Sarrabayrouse y Eduardo Celasco, la nieta de Susana Giménez es noticia prácticamente desde que nació, y cada situación que la envuelve termina impactando en los medios.
Si bien siempre trata de mantener absoluto hermetismo sobre su vida privada, Lucía lleva una vida fuera de los flashes y hace unos años emprendió su propio negocio con la tienda The Vintage Hole junto a dos amigas. Desde joven buscó independencia económica, y hoy a sus 27 años lo sabe.
De todas formas, dentro de la era de la virtualidad que vivimos, parece difícil no conocer detalles de su día a día dado el contenido que genera a menudo dentro de sus redes sociales. Allí reúne más de 290 mil seguidores, enamorando a todos con su belleza natural y sus diferentes posteos.
De gran gusto y mucho estilo, la joven suele marcar tendencia con todos sus looks. Más de una marca de indumentaria la elige como modelo para lucir sus prendas y definitivamente es el camino que ha elegido para su vida, siendo una todoterreno en cuanto a moda y diseño.
Aquel bajo perfil que descamos previamente comenzó a cambiar un poco a partir del último verano, dentro del cual se ha podido ver a Lucía muchísimo más activa en las redes y compartiendo sus espectaculares outfits de ocasión.
Sin embargo, semanas atrás causó revuelo no tanto desde el estilo o diseño que eligió llevar, sino gracias a una historia de su Instagram en la que se mostró llevando lencería y desatando los suspiros de todos. La joven se tomó una selfie y la subió a sus redes, enamorando a sus miles de seguidores.
Más allá de mantener su pasión por la moda en todo momento, algo que incluso reflejado en dicha imagen que posteó, la imagen de Celasco vistiéndose con un baby doll rosa y blanco, con un diseño de puntillas y frunce en el escote, despertó una lluvia de corazones en su IG.
Este no ha sido su único movimiento en redes durante los últimos días, recordando que hace poco sorprendió a todos tomando un look muy característico de su abuela Susana al llevar unos leggings de animal print, cambiando su color de pelo por unas mechas platinadas o mismo días atrás cuando presentó a Chulo, su nuevo perrito.