Máxima Zorreguieta llegó al sur de Argentina para pasar las fiestas rodeada de amigos y familiares. La reina de los Países Bajos decidió volver a su tierra natal tras un año viviendo en el Palacio Huis ten Bosch, en La Haya. Su presencia no pasó desapercibida, ya que fue vista paseando como una turista más por las calles de la Patagonia.
La reina lució un look casual y práctico que llamó la atención por su elegancia. Optó por un pantalón blanco de corte recto, una campera marrón y zapatillas deportivas en tonos marrones y naranjas. Para mayor comodidad, llevó un bolso cruzado y el pelo recogido en una cola sencilla, sin maquillaje, mostrando su estilo relajado. Ese fue el look que usó el 31 para despedir el año, disfrutando de la Patagonia con su familia y amigos.
Durante su estadía, Máxima y su familia se alojaron en la estancia Pilpilcura, una propiedad de tres mil hectáreas ubicada cerca de Bariloche. En este lugar, la familia real celebró la Navidad y planea recibir el Año Nuevo rodeada de naturaleza y tranquilidad. La estancia es un refugio ideal para desconectarse de las responsabilidades y disfrutar del aire libre.
A pesar de la seguridad que acompaña a la familia real, Máxima logró mezclarse entre los turistas con su actitud sencilla. Según fuentes cercanas, también se espera que su madre, María del Carmen Cerruti, se una a las celebraciones para compartir más tiempo en familia y fortalecer los lazos.
EL REGRESO DE MÁXIMA A ARGENTINA
El regreso de Máxima a Argentina no solo le permitió reconectar con su tierra natal, sino también disfrutar de momentos únicos con sus seres queridos. Su look relajado y su cercanía con la gente destacaron en cada paseo que realizó por la región.
La reina de los Países Bajos está lista para recibir el nuevo año con una conexión especial con sus raíces argentinas. Mientras tanto, continúa paseando por la Patagonia como una turista más, disfrutando del paisaje y la tranquilidad que ofrece el sur del país.