Si hay alguien que realmente se toma su tiempo para disfrutar las tan anheladas y merecidas vacaciones de verano es ella, de profesión actriz, coreógrafa y empresaria. Es que luego de un año cargado de trabajo, proyectos y responsabilidades con sus distintas escuelas de danza, Reina Reech (61) aprovechó cada día de lo que va de 2020 rodeada de familiares y amigos, tanto en Buenos Aires como en el exterior.
Fiel a su postura ante la vida, ella disfruta y vive relajadamente cada momento. ¿Cómo empezó el nuevo año esta bella mujer para quien el tiempo parece no pasar? Los primeros días de enero se instaló en Punta del Este, en la zona de Las Piedras, donde disfrutó de los paisajes, de fiestas en la playa, cenas con amigos y la visita de su nieto, Toribio.
“Estuve en Punta porque es una ciudad que me gusta y me invitaron a una cena a beneficio de varias entidades: entre ellas, las mujeres de negro que luchan contra la violencia. Después me fui a lo de una amiga y pasé unos días con ella y su pareja, disfrutando de una ciudad que me encanta. También estuvieron Juana y Torito. Con mis hijos tenemos una relación de mucho amor y confianza. Crie dos hijos maravillosos y buena gente”, cuenta.
Y fue en ese marco veraniego donde Reech posó sensual, a orillas del mar, luciendo distintos tarjes de baño enterizos que destacaban su modelada figura. Dueña de un cuerpazo increíble, más de una vez a la exbailarina se le preguntó cual es su secreto para mantenerse en forma y verse siempre radiante.
Y ella comentó: “Tomo seis vasos de agua diarios. Como mucha fruta, tomo mucho mate y como sano. Hago yoga dos veces por semana, no sólo porque elonga mi cuerpo y lo mantiene en eje y sin las molestias de la edad, sino porque también integra mente, espíritu y cuerpo. Y es para tener un rato de meditación, respirando conscientemente, que para mí es lo más importante y lo que más me ayuda a estar bien. Eso equilibra mi energía. Vida sana y alegría es lo más importante. Meditar es simple, silencio y contemplación, tratar de estar un rato habitando tu cuerpo y tu corazón. Esta es mi vida, lo que me divierte compartir con la gente”.
–Ahora estás en Miami, pero antes hubo una escala en Buenos Aires.
–Volví a Buenos Aires y estuve a full porque además de dedicarme al arte y las escuelas me ocupo del mantenimiento porque me gusta, les estamos dando una lavada de cara. Me gusta estar atrás de los colores que vamos a usar, qué poner y en los detalles. Y ahora estoy con Juanita y Toro en Miami. Tengo acá toda mi familia, muchos, y también está mi mejor amigo, Esteban Villarreal. Acá es permanentemente estar con gente. Juanita no los veía hacía tres años porque habíamos venido a Miami con Toribio de cuatro meses. Era una deuda volver con él que acá está chocho, jugando y disfrutando con sus primas americanas. Cuando estoy con mi nieto lo miro todo el tiempo.
