En el devenir de esa convivencia interminable, Furia y Lisandro Navarro atravesaron diversos estadíos en la casa de Gran Hermano, con una fluctuación enorme en su lazo, que atravesó diversos campos desde el coqueteo hasta los enfrentamientos y el desequilibrio emocional.
La más polémica del reality le confesó en diversas ocasiones que le encantaba su estilo, que poseía los atributos idóneos para activar su interés, pero también lo enmarañó en unas maniobras psicológicas, que a la postre le costaron su eliminación de la competencia.
A pesar de las variaciones siempre ha quedado flotando en el aire la idea de entrelazarse en un casamiento. Esa situación no se concretó durante la vigencia del programa de Telefe, pero sí se logró llevar a cabo en el ciclo de streaming de Gastón Trezeguet en la plataforma República Z.
Juliana Scaglione y Licha se prestaron a ese juego, a ese pedido de un grupo de fanáticos de las redes sociales y actuaron la ceremonia, que ofició el analista de Gran Hermano. El musculoso le dedicó unas concepciones muy positivas a la doble de riesgo: “Quiero decir unas palabras. Primero, me alegra y espero que los hayamos divertido a todos con nuestros momentos”.
FURIA Y LISANDRO SE CASARON TRAS SALIR DE GRAN HERMANO
A pesar de su supuesto cariño y comunión con Los Bros, Navarro le tiró flores a Juliana: “Y gracias a Furia porque sin ella este Gran Hermano no hubiese estado a la altura, fue la gran protagonista, pese a quien le pese. La relación amor-odio adentro de la casa fue real, pero afuera vamos a ser grandes amigos”.
Con un atuendo muy singular, con el que simuló un velo blanco, y un ramo de flores en la mano, Scaglione le devolvió gentilezas al morocho con una serie de piropos. “Apenas abrí las puertas de la casa lo primero que vi fue la sonrisa de Licha y cuanto me fui también”, expresó.
"Lo único que me importa es verlo feliz, así que gracias por esta boda. Ven algo entre nosotros que yo no veo y me equivoqué”, agregó Furia sobre Navarro. Luego, se prestaron a un beso para sellar el paso romántico, ante la mirada atenta de Laura Ubfal y Trezeguet.