Darío Szeta terminó su relación con Soledad Barutti, su compañera de vida de los últimos años, con quien llegaron a trabajar juntos. Sin "máscaras", el reconocido filósofo y hermano del periodista Mauro se sinceró sobre todas las emociones que le generó la ruptura amorosa.
"Me acababa de separar cuando llegó el libro de Gabriel Rolón, El duelo, a mis manos. Yo estaba hecho...básicamente dado vuelta. En una sensación de imposibilidad de salir del pozo. Esta sensación es básicamente la de un desgarramiento", confesó Darío.
"Separarse es una especie de caída de una totalidad que funcionaba. Sigo duelando, uno duela eternamente, y en el medio me pasaron otras cosas. pero fue un momento clave, de inflexión, de empezar a salir. En una separación, lo que se te cae es un mundo", afirmó Szeta en Demasiado Humano, su programa en FutuRock.
"Lo que se te rompe, y me encanta la imagen del trapecista, es que estabas anclado en un punto firme. Entonces, el duelo no tiene que ver con la pérdida del amor solamente sino con el vértigo y la pérdida del centro. Hay algo en el desamor muy asociado a la verdad cruda", reconoció el filósofo en charla al aire con Rolón, uno de los psicólogos más prestigiosos del país.
DARIO SZETA HABLO A CORAZON ABIERTO DE SU SEPARACION
"Uno le huye a las separaciones, nadie se queda ahí. Y a mi me gusta pensar que la vida no es lo que sucede entre amor y amor sino entre separación y separación. Siempre nos estamos separando. Desde que nacimos nos estamos separando", reflexionó Darío en voz alta.
"Tengo una especie de recurrencia en el desamor que me genera un disfrute. Me encanta la idea de no caer en el abismo del sufrimiento pero me asusta la idea de que, en una sociedad como la nuestra, que siempre es pum para arribista, el negacionismo", concluyó Szeta.
