La separación de Evangelina Anderson y Martín Demichelis fue un verdadero baldazo de agua fría dentro del mundo del espectáculo. La pareja quedó envuelta en una polémica luego de que se diera a conocer que el DT le habría sido infiel a la modelo, teniendo un amorío con una azafata que conoció en uno de sus viajes cuando era técnico de River.
La información la dio a conocer Yanina Latorre en LAM, explicando que la ruptura parece no tener punto de retorno ya que la modelo habría descubierto todos estos engaños y tampoco estarían conviviendo, recordando que ahora la familia se encuentra en México por los compromisos deportivos que asumió Demichelis en Monterrey.
“A Evangelina le había llegado el mensaje de que él estaba saliendo o había salido con una azafata de una aerolínea a la que conoció en un viaje que había hecho con River, cuando van a concentrar. No sé cuánto duró ese vínculo. Cuando a Evangelina le llegó el mensaje sobre lo de la azafata, Demichelis le confesó que era cierto. Entonces, ella lo echó”, explicó la angelita.
Lo cierto es que luego se conoció el nombre de la azafata, que en su cuenta de Instagram se presenta bajo el nombre “Taniusland”, con nombre “Tan”, y se describe dentro de su bio como "tripulante de cabina, chica motociclista, pole dancer y físicoculturista en progreso".
LAS FOTOS DE TANIA, LA AZAFATA QUE CAUTIVÓ A DEMICHELIS Y ARMÓ UN ESCÁNDALO
Dentro de los detalles que se dieron a conocer por estas horas, y desde que fue vinculada a Demichelis, se sabe que la mujer participó de la Copa Rocky, una importante y reciente competencia sudamericana de fisicoculturismo. Además, entre otros datos, hace aproximadamente un año y medio se realizó una rinoplastía para mejorar la apariencia de su nariz.
La mujer tiene la cuenta de Instagram en privado, por lo que de momento mucho más no se sabe de ella. Lo que sí parece ser claro es su reacción ante el escándalo entre Evangelina y el nexo con Demichelis, ya que por estas horas publicó una selfie que se tomó desde la playa de Miami, en bikini y con lentes de sol, con una letal frase que parecía ser dirigida hacia la modelo: “Y si yo hablara... más de una no volvería".
