Explotó en Gran Hermano, en esa edición iniciática, la que causó un impacto descomunal en la sociedad. Desde las entrañas de la casa más famosa brotó a la fama, sin escalas, Tamara Paganini. Esa exposición le trajo aparejada algunas secuelas adversas, que ella misma se encargó de especificar en reiteradas ocasiones.
Con otro aplomo, otra prestancia, la blonda transita por un presente cálido, con la estabilidad de una pareja de más de doce años y una gama variedad de ocupaciones que la entusiasman. La ex participante del reality visitó el piso de Intrusos y ahondó en su actualidad.
Respecto al análisis del hoy, de las características de su cotidianidad, Tamara reflexionó con mucha honestidad las sensaciones que la distinguen: “Mi vida hoy es hermosa. Costó mucho, pero es hermosa. Me estoy poniendo una productora, estoy en pareja con la misma persona desde hace 12 años".
En ese testimonio, Paganini se tentó al analizar la extensión de su historia de amor y exteriorizó: "Es un milagro porque nunca había cumplido más de tres años con alguien". En ese momento, el panelista Pablo Layús aportó que su novio ejecutó un papel decisivo para su optimización emocional, ante lo cual la blonda admitió: "Él me cambió la vida".
EL EXTRAÑO TRABAJO DEL MARIDO DE TAMARA PAGANINI
Con ese giro en la charla, Marcela Tauro le consultó respecto a la profesión de Sebastián Cavalieri. Así llegó la descripción de una actividad singular, ya que Tamara manifestó: "Él hace de todo un poco, pero principalmente reparte pornografía a mujeres adultas porque le gusta masturbarse con otras mujeres".
En pos de clarificar, Paganini ahondó en las vertientes laborales de su novio y explicó: "También se dedica a la gastronomía, asesoramiento y diferentes cosas. Es medio empresario, podríamos decir, creo que sí". Y recordó el punto de origen de este vínculo amoroso: "Lo conocí en un bar, él tenía un karaoke hace mucho tiempo. Somos dos locos".
