A cinco meses de blanquear su relación, Luciano Castro y Griselda Siciliani tomaron una decisión radical que, en el mundo de hoy, suena a señal inequívoca de que hay problemas entre los dos. Al menos, intensos cortocircuitos. Acaso… ¿una separación definitiva?
La hipótesis de que Castro y Siciliani se separaron empezó a circular cuando se detectó que el actor había borrado todas las fotos con Griselda del feed de su Instagram, eliminando toda huella de la mujer con la que le había sido infiel a Flor Vigna, como la bailarina aseguró en varias oportunidades.
Y ahora, un nuevo gesto enciende esa teoría: los dos se dejaron de seguir de Instagram. Así, de un plumazo, Luciano ya no ve las publicaciones de Siciliani, por estrenar “Envidiosa” en Netflix, ni ella está al tanto de los posteos que sube él, concentrado en sus proyectos.
El dato (detectado por la cuenta de IG mecomprendezmendez), resultó una sorpresa total, porque hasta el momento no había indicios de roces ni crisis. De hecho, recientemente los actores se habían ido de escapada romántica a Brasil, desde donde se filtraron algunas fotos acarameladas. ¿Qué pasó en el medio?
LOS GESTOS DE CRISIS TERMINAL DE LA RELACIÓN DE LUCIANO CASTRO Y GRISELDA SICILIANI
En la misma cuenta advirtieron que seis días atrás, Griselda Siciliani había visitado a Castro a una producción de fotos en el barrio de Agronomía. Lo cierto es que, hasta que no haya comunicado oficial de su parte, la decisión de dejar de seguirse en redes no es concluyente de separación.
Como sea, este gesto digital de darse “unfollow”, sumado al hecho de borrar sus fotos, cobra una gran relevancia en estas épocas y se convierte en todo un mensaje, una manifestación expresa de que los caminos de dos personas están completamente bifurcados. Ampliaremos.
