El próximo jueves 27 de junio se llevarán a cabo tres casamientos en la actual edición de Gran Hermano. La más inesperada es la de Emmanuel y Darío. Sin embargo, el cordobés no está contento con esta decisión y expresó su descontento por la obligación que le impusieron.
Mientras estaban en la habitación hablando sobre lo que serán las bodas, Vich estalló de furia y confesó que está negado a casarse. Sus compañeros quedaron anonadados, ya que no podían concebir la idea que el peluquero quisiera cancelar todo.
Con el mate en la mano, Emmanuel empezó a los gritos y dijo: "Estoy re caliente que me hacen casarme con Daro, boludo. Para mí no es chiste. Estoy re caliente. No me pinta. A mí no me pinta, en serio. ¿Sabés cuántos años estuve yo para poder casarme?".
"A mí me chupa un huevo, me da soberanamente por las bolas. Estoy hasta las bolas. Dije que sí y le di un beso (a Darío), pero lo hice por show. No me gusta que la gente no sepa sobre mi lucha, sobre la marcha... Esto no es una misión. A ustedes le da gracia, pero a mí no", sumó.
EL VERDADERO MOTIVO POR EL QUE SE ENOJÓ EMMA Y SU CASAMIENTO CON DARÍO
Ya en el confesionario, Emma reveló por qué supuestamente se enojó con el casamiento: "Perdón, pero ya saben lo que soy cuando me caliento. Fue todo un show que acabo de dar. Él (Darío) pensaba que era una misión. La podemos seguir, hacemos de cuenta que todavía no quiero casarme con Darío".
Tras esto, siguió con su misión personal e intentó desestabilizar a Darío Martínez Corti. Lo insultaba de pies a cabeza, algo que desconcertaba al oriundo de La Plata. Al final, terminó revelándole que todo se trataba de una broma y volvieron a amigarse.
