Corría 2009 cuando Luli Fernández y Pablo Mouche se cruzaron y se enamoraron mientras ella conducía el ciclo Área 18 en TyC Sports y él era una joven promesa de Boca Juniors, de visita en el programa. Durante tres años, Luli y Pablo fueron una de las parejas más queridas del medio, hasta que todo terminó.
La relación de la modelo y el futbolista, que había escalado hasta la convivencia e incluía un proyecto de boda, se hizo pedazos en 2012 de manera abrupta, sin que se supiera en su momento qué había detonado la separación.
Se habló de infidelidades de parte del futbolista, que ella lo había descubierto in fraganti con dos mujeres en su casa, pero ella lo negó años más tarde, de visita en La Pelu. Allí, en el programa que conducía Flor de la V en Telefe, Fernández reconoció que ella nunca fue “pacifista” y que esa escena nunca ocurrió.
“Cualquier persona que habla conmigo un minuto sabe que, si encuentro a mi pareja con una, dos o tres mujeres, lo último que hago es darme vuelta llorando”, dijo, y agregó: “Me voy con las cabezas de esas dos yeguas en las manos y el muchacho agarrado a la silla y prendido fuego. No soy pacifista en ese aspecto”.
EL MOTIVO DE LA RUPTURA DE LULI FERNÁNDEZ Y PABLO MOUCHE
Durante esa misma nota, Luli Fernández aclaró lo que le había pasado con el ex futbolista de Boca: la relación se agotó por puro desgaste. “El amor puede ser muy intenso, y como es de intenso es cuando llega, también se va. Son momentos y son ciclos”, reflexionó la modelo y conductora.
Lo cierto es que, al poco tiempo de separarse, Luli conoció a Cristian Cúneo Libarona, quien es hoy su marido y padre de su hijo Indalecio cuando se acercó a un estudio jurídico en busca de asesoramiento legal. Con él, todo fue muy rápido: se casaron en 2014 y fueron padres en 2019 y hoy tienen una familia ensamblada.
