No la va a llamar Bizarrap para hacer una "session" en contra de su ahora ex novio, pero Sofía Aldrey descubrió las múltiples infidelidades de Fede Bal como Shakira las de Gerard Piqué. A ver: no porque le comían las mermeladas, sino por el horario en que se ponía en funcionamiento el lavarropas. Increíble, pero real.
La que cantó todo, sin tonada barranquillera ni rimas pegadizas, fue Yanina Latorre en LAM. Según la panelista recién regresada de unas largas vacaciones en Miami, "Sofía y Fede tienen un lavarropas con Wifi, y ella lo tenía conectado con su celular. Lo que le llamó la atención fue que el lavarropas, cuando ella no estaba en Carlos Paz, empezaba a funcionar a las tres de la madrugada, algo que le avisaba el celu, y se empezó a preguntar qué pasaba allí".
"Un día cayó y quiso saber qué se levaba a esa hora. Eran las sábanas de Fede. Entonces ella llegó a la conclusión de que el único motivo que podía justificar que se pusiera a lavar las sábanas a esa hora era porque había estado con otras minas. Y ahí lo encaró", siguió Latorre.
Con información de primera mano en torno a la escandalosa separación del protagonista de Kinky Boots con la empresaria marplatense -integra la familia de los propietarios de varias firmas muy tradicionales de la ciudad feliz- Yanina contó que el paso siguiente tuvo que ver con otro celular, el de Fede. Y que estaba lleno de mensajes con otras mujeres, algunas de ellas muy famosas. Evidentemente, la tecnología es anti piratería.
Hace nada más que unos meses, el mundo entero se vio sacudido cuando Shakirá echó de la casa familiar a su marido y padre de sus hijos Gerard Piqué al descubrir de una manera "poco convencional" que él la estaba engañando. Sus sospechas comenzaron cuando advirtió que un pote de mermelada de un gusto que sólo comía ella y que había dejado sin abrir antes de un viaje tenía un faltante importante de "producto" cuando volvió y se dispuso a saborearlo.
"Aquí ha estado otra mujer y ella se comió mi mermelada" concluyó "Shaki", con el "agravante" de que era un gusto que Piqué aborrecía y rechazaba con todo su ser: no había otra posibilidad que fuera "la otra" la que había metido la cucharada donde no debía. Y en otros lugares también, pero esa es otra historia. Ahora fue Sofía Aldrey la que quedó con la idea de las trampas de Fede dando vueltas en su cabeza. Dando vueltas como las sábanas en el lavarropas.
