La relación de Gladys La Bomba Tucumana y su ex pareja en épocas del Bailando, Sebastián Escacena, entró en un definitivo punto de no retorno. A la acusación de ella de "estafas e infidelidades reiteradas" le siguió una tremenda devolución por parte de él. El muchacho, que tras su explosión mediática se dedicó a trabajar como colectivero en San Miguel de Tucumán, difundió un escandaloso audio que le mandó la cantante.
Para defenderse de las palabras de Gladys, que lo trató de vago ("nunca lo vi trabajar"), vividor ("lo mantuve mucho tiempo"), infiel ("él mismo me confesó, como decimos en Tucumán, que me "hizo aca" un montón de veces y con un montón de mujeres") y estafador ("se quedó con mi auto y lo maneja lo más tranquilo el señorito...") Escacena se comunicó con Karina Iavicoli.
"¿Te acordás que me decías que no me podías dar un beso en la boca? Bueno, mi novio ahora me la come" le dijo Gladys en el venenoso audio que le mandó a su ex. Yanina Latorre se lo festejó.
La panelista de LAM no sólo pasó el audio, sino que además mostró las fotos que, según Escacena, le mandó Gladys antes de sacudirlo con una frase demoledora. En las imágenes se la ve con su flamante novio, un muchacho que vive en la localidad santafesina de Pavón Arriba, y portando una figura muy estilizada enfundada en un ajustadísimo conjunto de lycra.
"Mirá Sebastián, fijate bien. ¿Te acordás de ese conjuntito muy ajustado de lycra que me compraste? ¿Te acordás que es una ropa que vos pagaste? Bueno, esa ropita que vos compraste y que vos pagaste y que me queda tan bien, mi actual novio me la saca, me la quita, ¿Entendés? Bah, novio... marido digamos, porque ya lo somos" dice el audio. La voz es inconfundible.
Pero eso, aunque parezca mentira, no es todo. Porque segundos después Gladys le tira otra bomba. "¿Estoy mal de lomo, viste? Te acordás que me decías que no me podías dar un beso en la boca, bueno él me la come" disparó como para que a su ex le duela.
El año pasado, Paparazzi ubicó a Escacena. un ex futbolista que no tuvo mucha suerte en el deporte, recorriendo la capital provincial arriba de un bondi donde se ganaba el sustento. En aquel momento, el fornido muchacho manifestó su intención de reconquistar a Gladys, con quien se había separado en medio de un bochorno que incluyó peleas y el comentario de ella de que estaba aburrida porque no tenían intimidad.
La relación parecía haber ingresado para siempre en el triste silencio del olvido perpetuo, pero está semana volvió a salir a flote cuando ella, de la nada, contó que lo había denunciado por estafa ya que se había quedado con un automóvil que era de su propiedad.
En esta relación, lo que viene medio "Escacena" es la calma y la tranquilidad.