Médicos, cirujanos, odontólogos, especialistas, kinesio, aparatos, equipos, anestesia, bisturí, tornos, radiografías, tomógrafo, quirófanos, consultorios, sanatorios, diagnósticos, cirugías. Por primera vez desde que fue brutalmente golpeado en Rosario, Tiziano Gravier se olvidó del vocabulario que le agobió la vida en las últimas dos semanas y pudo salir a divertirse. En la gala por los 100 años de Para Ti, a la que fue para acompañar a su mamá, Valeria Mazza, sedujo y conquistó a Juanita Tinelli, nada más y nada menos.
El evento tuvo lugar en los paquetísimos y glamorosos salones del Hotel Alvear, en el corazón de Recoleta, para muchos el barrio más coqueto y sofisticado de Buenos Aires. Allí, la revista de modas y actualidad por excelencia de la Argentina celebró "su primer centenario", al que llega revitalizada, briosa, jovial y gozando de una excelente salud.
La convocatoria fue excelente. Una cantidad impresionante de representantes del mundo "fashion" se acercaron a brindar junto a la publicación que acompañó toda su vida a pesar del "freezer" en el que se había convertido la noche del miércoles 22 de junio, con una sensación térmica que iba de 2 a 3 grados y una humedad que hacia que el frío penetrara los huesos.
Valeria Mazza es la mujer con más tapas en toda la historia de Para Ti. En virtud de eso fue una de las principales figuras de la celebración. Algo así como la reina de la noche junto a figuras de primerísimo cartel como Pampita, Nicole Neumann, Araceli González o Sofía Zámolo. Estaba, como siempre, elegantísima. Su presencia no fue sorpresiva. La de su hijo Tiziano, si.
Tiziano estaba de traje y corbata azules y camisa blanca, una combinación perfecta en la que se destacaba junto a su papá, Alejandro Gravier, y sus hermanos. Dio notas, se mostró amable, afable, educado, sereno, medido en sus palabras a pesar de todo lo que le sucedió y aún deberá pasar y padecer. Es algo que le reconocen no sólo a él, sino también a sus padres, Valeria y Alejandro, quienes en todo momento se manifestaron más proclives a aceptar las disculpas de los agresores que a prometer venganzas violentas.
Pero sobre el final de la jornada decidió "no perder la oportunidad" y después de cruzar algunas miradas con ella encaró a Juanita Tinelli, que le siguió la corriente y se prendió en una charla amena, divertida y muy muy muy cercana e intimista al punto de sus rostros, sus oídos y sus bocas quedaron a escasos centímetros. Comparten pertenecer a familias famosas desde el día en que nacieron y, por lo que se vio, unas cuantas cosas más. El tiempo dirá...