Viajó al exterior como ciudadana común y silvestre y volvió a la Argentina convertida en "la flamante novia de Jorge Rial". Y así como a ningún periodista en su sano juicio se le habría ocurrido cubrir su partida rumbo a Nueva York (el periplo incluyó también Marruecos y Madrid) en el regreso a Ezeiza se encontró con Gonzalo Vázquez, que la entrevistó para Intrusos. Josefina Pouso descubrió, de buenas a primeras, el precio de la fama.
Bien predispuesta, como si no hubiera viajado las casi 15 horas que demanda el trayecto Madrid-Buenos Aires, la periodista y opinadora -sus últimos trabajos televisivos fueron como panelista de diversos programas, entre ellos Intratables- Pouso se mostró jovial y distendida en su charla con el cronista, quien la fue a buscar alrededor de las 6 de la mañana.
A diferencia de otras figuras, que hubieran elegido el silencio o salir por otra puerta para despistar a la prensa, Pouso ni siquiera apuró el paso. Caminó, eso sí, hasta salir del pabellón cerrado. Una vez que estuvo al aire libre, se detuvo y "dio una nota". Poroto para ella. En el diálogo, aseguró que con Rial "nos estamos conociendo", afirmó una y otra vez que "todavía no hay nada para blanquear", no fue muy precisa en cuanto a las fechas del "comienzo de la relación", se refirió a la reacción de Romina Pereiro -ex de Rial- y destacó que su "flamante noviecito" es un hombre "muy divertido".
"Estoy bien, cansada pero muy bien" dijo Pouso mientras le empezaban a brillar los ojos, quizás sorprendida por la mediatización de la noticia. "Allá lo que hice fue tratar de aislarme y disfrutar", contó, para segundos después reconocer que Rial "se tomó bien que la noticia se haya difundido. Tampoco podíamos estar encerrados y escondidos todo el tiempo. Incluso, en el bar, en un momento él me dijo "ves esa señora rubia que está allá? Bueno, nos sacó una foto".
"Lo que no quería, un poco, era esto", admitió la morocha, para después afirmar que "nosotros no tenemos nada que ocultar porque estamos en una... muy nueva. Tampoco es como para blanquear algo, no es momento para hacerlo". Allí, Vázquez le preguntó por "los tiempos de la relación". "No lo sé exactamente porque tampoco llevo tanto las fechas. La primera vez que nos vimos debe haber sido a fines de marzo o principios de abril. Fue en un hotel de Recoleta. Después fuimos a un evento de "gintonic" en el hipódromo donde un amigo nos invitó a su casa a una fiesta de música electrónica, y él vino, pero no es de ese palo y prefirió ir a ver una pelea".
Esa noche, según reveló Yanina Latorre, Rial fue a esa fiesta "y bailó un poco de música electrónica, pero se quedó dormido en el living y Pouso aprovechó para encamarse con el dj, que encima era el ex de una amiga". Pouso hizo silencio cuando "Gonzalito" le preguntó. Sí respondió cuando la puso entre la espada y la pared acerca de la airada reacción de Romina Pereiro, que le mandó un mail a su ex "diciéndole de todo". "Romina está en su proceso, y por supuesto que la respeto", señaló. Por último, remarcó que Rial "es muy divertido, sí" y destacó a "las charlas lindas que tuvimos" como lo mejor de los encuentros. ¿Será?
