Cualquier movimiento, todo tipo de indicio y hasta el más mínimo detalle de la vida de la China Suárez imanta al público y se transforma en una noticia. La actriz navega bajo el ojo examinador, por la magnitud de su figura y sus controversias mediáticas.
En el último tiempo, María Eugenia provoca interés por su plano amoroso, ese nuevo escenario que se activó tras la ruptura de la pareja que supo configurar con Rusherking y que atrapó a la industria durante poco más de un año, por las características singulares de esa relación.
Ahora, la China se mostró con otro joven, también influencer y músico, que se llama Lauty Gram, con quien paseó muy románticamente por Uruguay, donde la fotografiaron en diversas situaciones de extrema complicidad, lo que denota un romance, una química.
En ese análisis de sus historias amorosas existe un dato poco conocido, que la propia Suárez se encargó de iluminar y que refiere al primer novio, a ese hombre que la deslumbró cuando apenas caminaba por la adolescencia y que nadie disponía de esa información.
En una visita al ciclo de streaming de Grego Roselló, María Eugenia relató la trama de ese iniciático fuego romántico. "Mi primer amor fue en Pinamar. Yo tenía 12 años”, confesó para darle un contexto espacio temporal a la circunstancia que la enfrentó con ese sentimiento.
Luego, la China aportó más detalles de lo que acontecía en esa época y sostuvo: “Mis amigas 15. Ellas estaban desarrolladas, súper bombas y yo era un Minion. A mí siempre me hablaban los varones para hacerles gancho con mis amigas".
Hasta que llegó el nudo de todo, el momento en que descubrió a ese joven que la estimuló sentimentalmente: "Había un chico que era espléndido, por el cual todas morían. Él tenía 14 años. Empezó a caminar hacia donde estaba y pensé que me iba a preguntar por Flor, una amiga, y me dijo algo a mí. Me morí".
