A poco más de 3 meses de haber dado el sí en el altar, Sol Pérez confesó que su matrimonio con Guido Mazzoni pasa por un momento delicado. En este sentido, se encargó de dar detalles y tratar de explicar qué es lo que sucede entre ellos actualmente.
El comienzo de año se dio bastante revolucionado para Sol Pérez, ya que le llovieron las ofertas laborales y se le está juntando el trabajo con sus estudios en abogacía, por lo que Guido Mazzoni está quedando al margen respecto al tiempo que le dedica.
Sucede que la panelista arranca el día con el programa “La casa” que se emite por Rumis de 11.30 a 14 hs. Finalizado este, comienza a dedicarle tiempo a Gran Hermano, ya que por las noches se hace presente en el debate. Y también se encuentra en la recta final en su carrera como abogada. Todo esto le termina quitando tiempo para estar con su pareja.
Ella sabe que se encuentra alejada momentáneamente de él: “Pobre Guido, ahora que estoy rindiendo me odia. El me aguanta. Fue el primero que me impulsó a hacer este proyecto: me dijo que tenía que confiar en mí porque me podía mostrar desde otra faceta menos acartonada”.
“Me hizo ver que estaba buenísimo para mí. Es de esos que se levanta y me prepara mates para que estudie. Tengo el mejor marido del mundo. Me tocó una persona súper buena, no me puedo quejar. Si lo hago, es de mala agradecida”, agradeció Sol Pérez reconociendo que está en un momento de tiempos acotados.
En este sentido, al ser consultada sobre cómo organiza sus tiempos entre su trabajo y Guido Mazzoni reconoció: “Ni lo veo. Hoy salí de casa a la mañana, nos cruzamos unos segundos, y ya no lo vi en todo el día”.
“Son las nueve de la noche ahora. Y ya me voy a Gran Hermano. Capaz que nos reencontramos a las dos de la mañana. Igual trato de pensar que también es lindo… cuando termine de estudiar, que espero que falte poco, vamos a tener tiempo de compartir el desayuno juntos o entrenar los dos. Ahora ni estoy entrenando”, comentó haciendo alusión a que sólo es por estos meses el esfuerzo que deben hacer.
Ante esta situación, cerró elogiando a su pareja: “Mi marido es perfecto. Que me banque en cada cosa que hago, cuando no me queda tiempo para dedicarle al vínculo o a la casa. Eso no lo hace cualquiera. Entiende que es un momento que va a pasar”.