Abrieron la puerta otra vez en Gran Hermano, para volver a embutir personas del exterior, para que el reality experimente un refresh y mantener la atención del público. Otra tanda de familiares, y seres amados, se metieron en la convivencia en estas últimas semanas de la temporada.
En ese grupo variopinto, Martín Ku disfrutó del reencuentro con su pareja Marisol, quien obtuvo visibilidad en estos meses por hablar largo y tendido en programas de televisión, así como por elevar su perfil en las redes sociales, hasta el punto de exhibir sus movimientos cotidianos como una reciente operación de nariz.
El Chino sintió emociones agradables, y movilizantes, al poder compartir unos días con su novia, por eso se los percibió muy pegotes, absolutamente entrelazados en estas primeras horas. Lo llamativo para muchos especialistas del reality se centró en el planteo veloz de Marisol sobre el uso de la casa que Martín se ganó en Gran Hermano.
Así se viralizó esa conversación que mantuvieron en el jardín, donde la mujer fue directo al tema: “¿Qué tenés pensado hacer con la casa?”. Evidentemente, la joven ya había prediseñado varios escenarios porque le manifestó: “Se me ocurrieron dos opciones muy divertidas. Una es ponerla en la costa como casa de verano y hasta la podemos alquilar”.
LA NOVIA DEL CHINO QUIERE ALQUILAR LA CASA QUE SE GANÓ SU PAREJA EN GRAN HERMANO
Tras escuchar esa primera apreciación, el Chino le respondió: “Pero hay que comprar un terreno, amor”. Mientras que su novia retrucó: “Es más barato en la Costa que acá en Capital”. En una típica conversación de pareja, Ku añadió: “En Mar del Plata podés alquilar porque es para todo el año, pero otro lugar en invierno muere”.
Marisol expresó una concepción que generó repudio en las redes: “Otra opción es un pueblito tipo Uribelarrea, una poron... así, como casa de fin de semana de descanso”. Esa definición sobre esa localidad bonaerense la sumió en el ojo de la tormenta. Mientras que el Chino la contradijo: “Ahí no se valoriza nada. Lo ideal es que se pueda usar tanto como para descanso, como para alquilar”.
La rápida propuesta de hablar del destino económico de la propiedad que consiguió Martín en un juego, direccionó a la joven al centro de debates en las plataformas digitales. En ese universo se amontonaron comentarios como: “Qué pesada, por qué no habla eso después”, “Ella solo piensa en plata”, “Por algo Arturo no la quiere”, “Todo bien con sus proyectos pero hablarlo ahí es muy de materialista, hace 6 meses que no lo ve”, “Me cayó como el ort... es muy caprichosa” y “Ella solita lo va a hundir”.
