Alcanza con leer la bajada de esta nota para marearse, ¿no? Sí, es una ensalada y se la resumimos “así nomás”: Marcela Pagano está feliz de la vida porque empezó una relación sentimental con Martín Sierra, el marido “engañado” en el romance clandestino entre Fernando Gago y Verónica Laffite.
Para resumirlo más fácil y en una línea podríamos opinar lo siguiente: triunfó el amor. Porque, en esta historia de traiciones en la que hubo, principalmente, dos personas damnificadas: Gisela Dulko y el ex marido de la instructora, al menos una de ellas pudo volver a apostar a la confianza.
Hablamos de Sierra, un hombre completamente anónimo hasta el momento en el que estalló el Gagogate y que ahora ocupa un lugar importante en el corazón de la periodista de A24, que ya confirmó el romance con todas las letras e incluso dio detalles de cómo arrancó.
Así lo hizo Pagano, en diálogo con Juan Etchegoyen, que contó todo lo que su colega estuvo dispuesta a confiarle en Mitre Live, luego de advertirle, sin embargo, que no hablaba de temas personales.
“Hola Juan, está confirmado lo del noviazgo con Martín. Yo no hablo de mi vida privada, pero no hay nada que esconder”, y aseguró: “Estamos de novios, estoy verdaderamente feliz”, dijo la rubia, vía mensaje de WhatsApp, reticente a ahondar en el tema pero también con ganas de decir su verdad y no quedar pegada al escándalo.
Y cuando Etchegoyen le preguntó cómo se conoció con Sierra, Marcela fue directa: “Laburando”. Nada extraño ni estrafalario, ya que ella tiene un programa en América y el abogado trabaja en el grupo del canal. ¡Bien por ellos!