No es chiste: Maxi Guidici tiene los cables "pelados" con Juliana Díaz, hasta hace unas horas la mujer a la que le declaraba un amor absoluto y le prometía lealtad eterna. Las cosas se dieron vuelta de un momento a otro -o desde que la santafesina dijo que prefiere que su ex no ingrese al Bailando- y ahora le tiró con todo, tratándola hasta de "mentirosa".
Sobre el cierre de la semana pasada, Maxi conmovió tanto a la farándula como a la sociedad al protagonizar un intento de suicidio que fracasó gracias al veloz, valiente y eficaz accionar del Cone Alexis Quiroga, quien llegó al departamento de su comprovinciano a pedido de la mamá del angustiado muchacho. Junto a la policía logró ingresar a su departamento y se apuró en convocar al Same. En el Hospital Ramos Mejía hicieron el resto.
Las horas siguientes alumbraron la recuperación física de Maxi, quien el sábado fue dado de alta. Lo que queda ahora es su puesta a punto anímica y psicológica, para lo que puede resultar clave la reconstrucción de los hechos y las situaciones que lo llevaron a pararse sobre ese punto de no retorno. Según Maxi, una de las situaciones que lo bajonearon a límites insospechados fue el quiebre definitivo de la relación con "Tini".
"No veníamos bien, pero que se yo... En un momento nosotros veíamos que en vez de potenciarnos era como que nos perjudicábamos, entonces decidimos cortar. Pero era tanto el amor que volvimos a intentarlo. Ahora, ¿Qué pasaba? Tengo que reconocer que a ella la llamaban más y a mi menos, y que en un momento eso me jugó muy en contra". Allí entra a tallar otro "jugador clave" de este partido: el Bailando.
MAXI GUIDICI LE DECLARO LA GUERRA A JULIANA DIAZ
"Yo necesito trabajar, porque veía que a muchos le iban saliendo cosas y a mi no. Decidí no hacer campaña para entrar al Bailando, crei que ella iba a hacer lo mismo pero después la hizo y entró, y yo quedé afuera. Eso me puso mal, y lo que terminó de arruinarme fue ver el posteo que hizo donde puso que la relación temrinaba para siempre. Que se yo, no esperaba eso y se me nubló todo. Compré alcohol, empecé a tomar, estaba nervioso, tomé una pastilla, seguía cada vez más nervioso y no me acuerdo mucho, pero me mandé todas las pastillas", admitió Maxi, quien aseguró que "entrar al Bailando puede ser mi salvación. Ese es mi objetivo".
Juliana aclaró desde un primer momento que no estaba de acuerdo con eso, aunque repitió una y otra vez que ama profundamente a Maxi y que le desea lo mejor aunque ya no sea su pareja. El cordobés fue ganando bronca y explotó al ver una publicación periodística cuyo título era "Juliana Díaz se quebró al hablar de la terrible situación de Maxi Guidic". Al observar eso no pudo contenerse y respondió con enojó y echando maldiciones. "Eso es mentira. No quiere que me metan al certamen. ¡Nada más!". Se pudrió todo. La guerra está declarada.