Por cómo se miran a los ojos y por cómo se les endulza el tono de voz cuando hablan uno del otro, si todavía no "pasó lo que tiene pasar" entre un hombre y una mujer es fija que sucederá en cualquier momento. Marcelo Tinelli y Millet Figueroa están embelesados. Si es un "cuento" para la televisión, si es todo "teatro" lo que hacen, si están "actuando" para tener unas décimas más de rating, que los lleven a Hollywood que se ganan el Oscar. Parece tan real...
El conductor del Bailando y la princesa peruana volvieron a coincidir en un evento nocturno. Pero una vez más estuvieron acompañados. A su alrededor había mucha gente (Pampita, por ejemplo), como si fueran dos adolescentes a los que no se los puede dejar solos y nada más pueden salir con sus grupos de amigos. En esa instancia fueron entrevistados por Intrusos.
"A mi ella me encanta" arrancó Tinelli "livianito". Cuando escucho semejante declaración, Millet contorsionó su cuerpo, devolvió una sonrisa y se sonrojó. Cuando lo volvió a observar, los dos parecían encendidos. "Lo digo en todos lados. Se lo digo a ella en la cara también. Totalmente" reafirmar sin dudar en sus sentimientos ni en sus convicciones.
Desenfadado y sin prejuicios, el muchacho de Bolívar enumeró posteriormente todas las cualidades físicas y personales que destaca de la doncella oriunda del país del Machu Pichu, la comida fusión, el pisco y los buenos futbolistas como Percy Rojas, Oblitas, Muñantes y más recientemente Paolo Guerrero. "Me parece una mujer muy atractiva. Pero no sólo eso. También la veo como una mujer muy inteligente y sensible. No nos conocemos tanto pero digo...", exclamó.
MILLET FIGUEROA QUIERE QUE MARCELO TINELLI PRUEBE SU TRAGO PREFERIDO
"Si se da, se dará. Que se yo", arriesgo Tinelli ante otro gestito tímido de Millet. Cuando el periodista quiso saber en qué momento se dará la salida "solos", Marcelo se trab:. "En cualquier momento... el otro día la invité con un gin tonic. ¿Estoy medio trabado no? Pasa que no me acuerdo para qué la invité". Fue entonces que ella tomó la palabra, y también se mostró decidida. "Lo encontré en un evento y lo noté muy cansado", aseguró.
"Estás con poco tiempo, Marcelo" le tiró el periodista. "No, pero tiempo para ella tengo" jugó su carta ganadora Tinelli. "Si se tienen que dar, las cosas se van a dar. No hay que apurar absolutamente nada. Nadie está apurado" se atajó ella. "Estás muy linda", la cortejó Marcelo, quien la volvió a invitar a "tomar el gin tonic que preparo". "Puede ser, porque la otra vez nos trajeron un gin tonic que no había preparado él, y la idea es que lo prepare. Yo se preparar Pisco Sauer de maracuyá y me gustaría que lo pruebe. Minentras yo preparo el trago él prepara la comida" lo desafío Millet. Como decía José María Muñoz, el "relator de América" con el que Marcelo empezó a trabajar siendo un purrete en Radio Rivadavia, hay peligro de gol...
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