Lo anticipó, lo vociferó con ahínco y cumplió. Nicole Neumann gritó, en reiteradas ocasiones, que no desea que nadie sepa la locación real de su boda. Una tendencia para salvaguardar su intimidad y para evitar el acceso de la prensa a semejante evento amoroso.
Todo ese pronóstico se transformó en realidad. Resulta que Nikita activó el proceso para ultimar detalles de su casamiento y envió las invitaciones a los afortunados que compartiran esa velada con ella y Manu Urcera. Claro, que lo llamativo se centró en la condición de top secret.
En Intrusos revelaron que varias personas recibieron la tarjeta y que la propia Neumann se encargó de remarcar que no les dirá el salón elegido hasta último momento. Una excéntrica manera de convocar, pero que evidentemente se enrola en su ferviente deseo de escapar de la prensa.
La noticia la reveló Maite Peñoñori, que describió todo esta movida de Nikita: “Ya fueron enviadas las invitaciones para la boda del año. Algunos invitados ya recibieron la invitación, que es virtual, no es en papel. Las hicieron con animación. Se ve un avión aterrizar".
CÓMO ES LA INVITACIÓN DE NICOLE A SU BODA
Y luego ahondó en el eje más controversial: “Como habíamos contado, será el 8 de diciembre en el sur. Pero ¿qué pusieron? Top Secret location”. Aunque sí se terminó de confirmar que la boda se festejará en la Patagonia: “Solo pusieron San Martín de los Andes, pero no aclaran la ubicación. Es top secret. La van a enviar a los invitados más cerca de la fecha".
En cuanto a los posibles motivos que empujaron a Nicole a utilizar este mecanismo intrigante, que en cierto punto dificulta la logística de los invitados que recorren cientos de kilómetros, Peñoñori expresó: “Te hacen eso de que bien sobre la fecha te mandan la ubicación para que no anden fogoneando”.
