El amor brotó en las entrañas de la casa más famosa entre Florencia Regidor y Nicolás Grosman, quienes se animaron a construir un lazo sentimental, que atravesó algunos vaivenes y momentos de tensión. Desde que la rubia quedó eliminada del reality se especuló con el futuro de la pareja.
Uno de los ejes más peculiares de la historia se centró en las declaraciones de la ex concursante, dado que admitió públicamente que la familia de su novio le había propinado un trato gélido y que incluso soltaron algunas concepciones negativas sin conocerla.
Por eso se generó un campo de tensión, que parece que se terminó y llegó a buen puerto. A través de los dichos de Antonella, la mamá de Nico que estuvo unos días en la casa, Florencia activó un acercamiento sincero, con el objetivo de recomponer las relaciones.
La progenitora de Grossman describió su lectura de una posible boda falsa en el interior de Gran Hermano. Ante esa posibilidad, Antonella sostuvo: “Quiero que Nico se case ahí. Que vaya Flor y que estemos todos felices y contentos. Si puedo ser la madrina, también”.
FLOR REGIDOR LE PIDIÓ PERDÓN A LA MAMÁ DE NICO GROSMAN
A la hora de confesar el gesto que ejecutó Regidor y que se convirtió en la clave para reconstruir el vínculo de nuera y suegra, la mamá de Nico contó con total naturalidad y honestidad: “Flor me llamó y se disculpó. Está todo bien. Es una divina, y también es chica”.
Evidentemente, todo se ha solucionado, lo que quedó comprobado con el abrazo de Florencia y Antonella en la tribuna de Gran Hermano, durante la reciente gala de eliminación, que terminó con la inesperada salida de Martín Ku de la competencia.