Es enigmática Sofía Bonelli. La envuelve un halo de misterio que no se diluye ni en la charla quince. Se puede decir de ella lo que salta a la vista: es morocha, tiene el pelo lacio, el cuerpo esbelto, delineado, llamativo y lleno de curvas. Camina como si quisiera partir la tierra y usa anteojos oscuros casi todo el tiempo. Detrás de esos lentes que frenan al sol se esconden un par de ojos brillosos y un montón de secretos que han envuelto en llamas a Claudio Paul Caniggia y desbordado de ira a Mariana Nannis, la ex del Pájaro.
Sofía habla tres idiomas. Castellano, como todos los que nacimos en este país, francés e inglés. Trabajó como modelo y alguna vez pateó la redacción del diario Clarín, donde pudo desarrollar los conocimientos que le dejó haber pasado por una escuela de periodismo. Tiene 25 años, es ariana y nació en Tigre, pero ya no vive allí. En realidad es difícil describir su morada: a veces está en Puerto Madero, a veces en Brasil, a veces en México, a veces en Uruguay.
“Me encanta viajar, es una de mis pasiones”, cuenta ella, tan misteriosa y tan intrigante como macanuda al momento de entablar un diálogo. El WhatsApp no revelará todas las verdades que ella aún mantendrá escondidas, pero nos acerca a su palabra cuando está en el ojo de la tormenta. La Nannis ya pasó por el programa de Susana y le tiró con todo. Aunque no la nombró, estaba claro que hablaba de ella. Primero llegaron dos audios. Después, un montón de frases.
Audio 1: “Es patética. Me da lástima esta señora. Los abogados ya se están ocupando. Legalmente estoy a full. Tuve que iniciar una demanda. Hay una carta documento que no se respetó por calumnias e injurias. No me nombró pero pusieron mi foto y mi imagen. A nivel legal la voy a llevar hasta las últimas consecuencias".
Audio 2: “Es una mujer que está despechada y tiene un ensañamiento conmigo, con la vida, con los amigos de Claudio, que dijo barbaridades y es todo mentira. Está desatada porque sabe que está sola, que se están separando y sabe lo que se viene. Es por despecho esto”.
Su palabra, su enojo
–¿La nota con Susana afectó tu relación con Claudio o ustedes están bien igual?
–Primero: estoy ocupándome del tema legal y estoy tranquila. Segundo: no me afectó en nada con nadie. No pienso hablar de Claudio. Tercero: le va a costar muy caro lo que dijo y dirá en su paso por los programas. Cuarto: son una vergüenza las cosas que dijo en contra mío por despecho, sentarse en lo de Susana y publicar mis fotos. Exponerme aunque no diga mi nombre. Expuso mi imagen haciendo alusión a las barbaridades que dijo.
-¿Y qué sentís?
-Pobrecita, no sabe con quién se metió. Me dio mucha lástima. Yo estoy muy tranquila y eso la pone peor. La pone peor que no vaya a los programas a hablar, porque yo no me rebajo a su mierda. Estoy más arriba, en otro lugar. Yo no necesito de un jugador de fútbol para vivir en Puerto Madero, irme de viaje o comprar en Gucci. Toda mi vida lo tuve y lo material me chupa un huevo. Manejo otros valores, otra educación.
–Nannis dijo que vino “a recuperarlo de la prostitución y la drogadicción”. ¿Te parece que tiene que aceptar que su marido ya no está con ella?
–Cuando habla suena a negadora serial, ja, ja, ja, ja, ja… Es lo único que te puedo decir.
–Además, lo trató de violento. ¿Fuiste testigo de algún hecho de ese tipo con Claudio?
–No voy a hablar de Claudio Paul.
–No hables de él. Hablá de vos. ¿Sufriste algún episodio de ese tipo en la relación? No es una pavada este tema…
–Nunca viví un episodio de violencia con ninguna pareja. El único episodio de violencia lo viví con la Nannis… Es increíble pero son las mujeres las que atacan a otras. Lo que se vivió en el programa de Susana es un gran ejemplo de violencia entre las mujeres y de machismo. Ambos, eh… Me sorprendió que Susana tenga que caer tan bajo…
–¿Tenés miedo de cruzarla y que te pueda hacer algo?
–No. Ella me tiene que tener RESPETO. Y miedo en el plano legal. Ahí que me tenga miedo. Mucho. Porque voy a ir hasta el fondo. Ya inicié las acciones pertinentes contra esta señora.
Hasta el final
–¿Y qué buscás con la demanda? ¿Alcanzaría con que te pida disculpas?
–No creo que las pida nunca jamás, su ego es más fuerte que ella. Me da lástima. Se la nota sacada y en muy mal estado. Le deseo lo mejor, pero espero que cuente con un buen abogado.
–Dijo que vas a ir presa…
–La que está a full con los abogados soy yo, desde marzo. Yo no cometí ningún delito. Está como loca, sacada, despechada. La quiero igual, eh… Me da lástima. La invitaría tomar el té, en serio. O la invitaría a ir de shopping.
–Si la tenés enfrente, ¿qué le dirías?
–Que la invito a Gucci y le compro una cartera si esa es su felicidad, ja, ja, ja, ja…
–Otra palabra que se usó mucho en la nota es “drogas”. ¿Alguna vez usaste?
–Juaaaaaaa… Me río. Los que me conocen saben cómo soy. No tengo que aclarar nada.
–Para aclarar dudas, porque se dicen muchas cosas, ¿siguen en pareja con Claudio?
–No voy a hablar de eso. Que cada uno saque sus conclusiones.
–Así estás dejando abierta la puerta de que cortaron…
–Ya te dije: no pienso hablar de Claudio.
–En la nota anterior, cuando te preguntamos si estaban de novios, dijiste que sí, sin dudar. Ahora guardás silencio. ¿Siguen en pareja o no?
–¡¡No hablo de él por más que sea mi futuro marido, ja, ja, ja, ja…!! Y ponelo, eh; es lo que pienso.
–Nannis dijo que no está separada de Claudio…
–Que diga lo que quiera. Si no están separados, no entiendo por qué está tan nerviosa. Ella está sacada. Es muy violenta por sus dichos y por cómo trata a las mujeres. Siempre las trata de trolas o putas. Así descalifica.
–¿Nunca se cruzaron?
–En el hotel me la crucé dos veces. Yo estaba en el gimnasio entrenando y ella me miraba desde afuera. Pasaba y miraba. Como una especie de acoso.
–Alexander salió a matar al papá en las redes sociales…
–Cada uno toma la postura que quiere. No me afecta para nada.
–¿Pero no te causa nada que digan esas cosas de vos?
–Obvio… Me da bronca, impotencia. Eso sí, pero no enojo. En cierto punto esa lástima que me da y ver que cayó tan bajo me hacen sentir mal por ella, que está despechada y tiene que aceptar que esta vez perdió. Perdió como en la guerra.