Desde Wanda Nara anunció su separación de Mauro Icardi, las cosas se pusieron muy confusas para quienes queremos interpretar qué está pasando en ese matrimonio que parece caerse a pedazos delante de todos.
Lo único que queda claro es que Wanda tampoco entiende demasiado, y así lo dejó ver en sus redes, cuando planteó a sus seguidores su desconcierto ante el comportamiento de Icardi, instalado desde hace unos días en Buenos Aires y con quien fue al cumpleaños de Kennys Palacios.
“Un día me sorprende y suma, al otro día se manda una y resta, ¿para cuándo un poquito de equilibrio?”, escribió la mediática en Twitter hacia el mediodía del martes 6 de diciembre. Un mensaje que muchos no terminaron de develar si estaba dedicado al deportista o a L-Gante.
Para que no queden dudas, Wanda arrancó con una seguidilla de “encuestas” en Instagram en las que, sin nombrarlo, hacía alusión a Mauro. ¿El detalle? Antes de este bombardeo de pros y contras de su marido, Wan se mostró tomando jugo en la casa de Elián, en General Rodríguez.
“Se tatúa tu nombre", escribió la hermana de Zaira, y dejó dos opciones para votar: "Suma" y "resta". “Te invita a una playa paradisíaca”, siguió, proponiendo las mismas alternativas. Y Wanda fue subiendo el tono. "Ventila intimidades por Instagram", puso.
“Sube una foto con vos con un mensaje romántico”, publicó luego, y remató con la más fuerte: “Le encontraste mensajitos sospechosos”. Pero, chicos: Wanda es viva, vivísima, y si bien estas inquietudes "encajan" con su historia y nos da de comer con material picante, la verdad puede ser otra.
Porque, después de estos pros y contras, invitó a sus seguidores a googlear Matrimillas, la nueva película que protagonizan Juan Minujín y Luisana Lopilato en Netflix. Y como último dato, para rematarla, ¿qué hizo Icardi? Cerró su cuenta de IG. ¿Les creemos otra vez?