La última canción de Abel Pintos (35) se llama El hechizo. Y así está él, hechizado. Hechizado por un amor que promete traerle lo más lindo que la vida puede regalar a un ser humano: la llegada de un hijo. Pero no es el único amor que lo tiene enganchando. Obviamente su novia, Mora Calabrese, ocupa un lugar central en esta historia.
Pero hay algo más detrás de este artista sensible y querido por el público. Y es el amor a sus perros. Y el 29 de abril, día del animal, él los presentó en su cuenta de Instagram y los celebró.
El cantante, nacido en Bahía Blanca, tiene cinco perritos que por primera vez decidió mostrarles a su millón 300 mil seguidores. “Lupe - Cacho - Potro - Jaime - Rita: ¡FELIZ DÍA! Los amamos", escribió al pie de las cinco fotografías junto a unos emojis de corazoncitos para homenajearlos.
EL AMOR EN TIEMPO DE CONFINAMIENTO
Y fue en su paso virtual por La peña de Morfi donde, conversando con Gerardo Rozín, Abel abrió su corazón y habló de los sentimientos que lo invaden en plena pandemia de Covid–19. "Vivir el embarazo en confinamiento nos pone en un estado de extrema sensibilidad", expresó.
"El deseo de ser papá me llegó estando en pareja. Nunca antes me había sentido listo. Cuando conocí a Mora me sentí preparado", reveló el romántico cantautor. "Aunque había fantaseado con la idea de que quizás algún día tendría un hijo, ahora es más concreta que nunca", agregó con el particular tono de voz que lo caracteriza.
"Esperar un hijo o hija te pone todo en una nueva perspectiva. Todo eso que pensás que aprendiste se relativiza. Uno espera haber aprendido mucho para poder tomar semejante responsabilidad y a su vez partís de que vas a aprender muchísimo con esta nueva etapa", finalizó.