Avanzan los días, el termómetro levanta vuelo en Buenos Aires y la casa de Gran Hermano empieza a arder por las cuestiones más cotidianas. Y, esta vez, Alfa, cada vez más intolerante y susceptible con el resto de los hermanitos, encaró a Coti por un simple y pedestre jugo en polvo.
Al parecer, esos sobrecitos son unos de los productos más codiciados en la casa, donde a algunos participantes les cuesta convivir en esta suerte de mini sociedad comunista donde “todo es de todos” y “nada es de nadie”. Al menos, según Walter Santiago, para Coti es así.
“Estábamos en la cocina buscando un jugo y al rato entra Coti y veo que saca un jugo de la mochilita para prepararse tereré”, anticipó Alfa en el confesionario, antes de que se vea la fuerte pelea a los gritos entre los dos que se dio en la cocina cuando apareció la rubia.
“Voy a empezar a llevarme el jugo también”, le dijo el hombre, al verla preparando la bebida. “Llevate, Alfa. ¡Nadie te dice nada!”, contestó ella. “Me los voy a guardar, sí. Vamos a ver si yo me guardo el jugo, qué dicen”, insistió él.
Y Coti se defendió subiendo de tono: “¡No lo estoy ocultando! Lo tengo. ¡Dejá de romper los huevos, Alfa! No te estoy molestando hoy”. “No te estoy molestando. Te estoy diciendo que nadie encanute a nadie porque yo me quiero hacer un jugo y no hay un jugo. ¡Y pará nena con el gritito, pará!”, gritó Alfa.
“Ah, vos sí podés gritarnos a nosotros...¡Y no me hagas así con la mano! Más vale que voy a hacer esto, porque es mío también”, replicó la correntina. “Yo no estoy gritando. Lo único que dije fue que te encanutaste un jugo”, avanzó él.
Y le dijo a Romina, que escuchaba todo en silencio, aunque luego terminó aconsejando a su compañera a bajar un tono: “Ponela en órbita a la nena, porque me parece que está confundida”. “Ponela en órbita, no. ¿Quién te creés que sos? Todos somos iguales en esta casa”, se la devolvió Constanza.
“¿Por qué tenés que venir vos a decir lo que tengo que hacer? ¿Por qué le tenés que estar mandando la vida a todos? ¡Siempre hacés lo mismo! Siempre tenés que contar las cosas que comemos a cada uno”, se quejó ella, indignada con el jugador que tiene tan alto perfil como ella, y que cerró: "Quedaste expuesta".