Si bien nació en Argentina, Anabel Cherubito se crió en España, por lo que de grande decidió retornar al país que le abrió las puertas de la fama y en las que supo explotar su mejor versión. Sin embargo, pese a esto, ahora debió dar un vuelco en su vida, por lo que con dolor lo comunicó.
Es que pese a brillar en la televisión durante más de 30 años y haber encontrado el amor, Anabel Cherubito descubrió que el país ya no es el lugar en el que vivió. Es que destacó que se “naturalizó la violencia”, por lo que con mucho dolor tomó la decisión de volver a España.
“Es muy triste que se naturalice la violencia y perdamos los derechos por los que luchamos tantos años, pero eso no es lo que nos impulsó a tomar la decisión de irnos, sinceramente”, expuso haciendo alusión a que algo cambió en el país y ya no siente la misma tranquilidad que en otros años.
Es por eso que Anabel Cherubito confesó qué hará de su vida: “Desde que nos conocimos con Luciano, hace ya 11 años, siempre hemos fantaseado con vivir en la naturaleza y además, hace muchos años que llevamos a la práctica cosas que sentimos y queremos para nuestra vida. Luciano es médico chino y yo soy profesora de yoga y estoy muy metida con la salud física y emocional, y la medicina natural. Eso nos atrae y tomamos la decisión de un cambio de vida, no solamente de país porque no me voy a Barcelona, que es mi ciudad”.
En este contexto, expuso que no sólo es una cuestión del país, sino que incluso es algo vinculado a la etapa de la vida que transita junto a su pareja e hijo: “Yo estoy volviendo a España. Me crié en Barcelona y allí viví hasta los 21 años, pero no queremos más una ciudad estresante. Nos vamos muy cerquita de Málaga, a un pueblito blanco, probablemente a Elviria o a Mijas. Elviria, que es adonde apuntamos, está a diez minutos de Marbella y a 40 de Málaga, al lado del mar y la montaña, tiene 3500 habitantes y hay gente de diferentes países viviendo allí”.
En este sentido, Anabel Cherubito contó que si bien no es la razón principal, la política jugó un rol importante: “Tenemos una hija de 8 años y eso influyó en nuestra decisión porque hace varios años que la Argentina viene en decadencia y cada vez se ve más la violencia, cuesta vivir y vibra una energía muy baja porque no estamos bien. Yo me considero una persona ideológicamente de izquierda y voto ideas, no personas, ni soy soldado de nadie”.
“Yo he votado en algunos momentos de mi vida al kirchnerismo, pero no me va ni un poquito ser soldado de nadie. Milito por los derechos humanos y los derechos de la mujer por mi propia historia; soy hija de exiliados y siempre he tenido una conciencia social muy grande por cómo me crie”, expresó sobre su ideología.