Tras regresar de sus increíbles vacaciones por exóticas playas y extraordinarios paisajes, seguramente son miles las anécdotas que deben tener Verónica Lozano y Analía Franchín. Y fue por eso que tras someterse al Intragable de Flor de equipo, la ex participante de Masterchef recordó algunos divertidos momentos del viaje.
A modo de dar inicio al desafío, Flor Peña le consultó a Analía qué descubrió de Vero. Antes de animarse a tomar el trago de Pitufo que le tocaba si no respondía, la periodista contestó "somos de agarrarnos piojos fácilmente".
“Llegamos bien. Se ve que ella tiene la sangre muy dulce porque la mordían. Yo le revisaba la cabeza y la tenía mordida, pobre. Tengo fotos que no las voy a mostrar. No sabemos quién fue la culpable, pero nos contagiamos”, siguió contando sobre la no tan grata experiencia.
Ya como momento más emotivo del juego, apareció en pantalla un video de Lozano donde le destacó que es una gran compañera de viaje y le pidió a su amiga que recuerde al aire una pijamada y un episodio donde hubo un hurto. “La pijamada no la voy a contar”, se limitó primero Franchín.
Pero sí se animó a contar la parte que tenía que ver con una especie de robo: “lo del cítrico lo voy a decir aunque me de vergüenza. Fuimos a un restaurante muy bueno. Y a mi nunca me salió la pollerita esa que le ponen al limón, como la cofia para que no se caigan las semillitas”.
"Pedimos una gaseosa con limón y le dijimos que nos gustaba con mucho limón ya que venían con esa cofia. Los fuimos agarrando y me llevé tres polleritas de limón", recordó Franchín.
“Es una paquetería. Esta era ideal, hecha a medida. Le pedimos una gaseosa con limón y le dijimos que nos gustaba con mucho limón. Así que nos trajo más grande. Y después pedimos otro. Los fuimos agarrando y me llevé tres polleritas de limón. Baratito, baratito”, remató Franchín.