En los recovecos del canal, en las entrañas mismas del edificio de América se produjo una hecho de inseguridad, del que fueron víctimas Mónica Farro y Marcela Feudale. Alguien ingresó en el camarín que compartieron en la emisión del martes de LAM y les robaron las tarjetas de débito, de crédito y efectivo.
La noticia se viralizó con fuerza este viernes y así la atención se direccionó al exitoso ciclo de Ángel de Brito por la singularidad de un episodio de estas características. Por eso, el conductor se tomó su tiempo para explicar la articulación de los acontecimientos.
En primera instancia, el periodista reconoció la sorpresa que generó este hurto gravísimo, que implicó unos gastos de más de doscientos mil pesos para la vedette y la locutora. “Nunca nos faltó nada y vinieron miles de invitados”, exteriorizó el animador.
Así como procuró añadir más detalles de lo que ocurrió esa noche: “Muchas veces vienen muchos invitados, más la gente que traen los invitados, amigos o asistentes, es muy común,. Ese día solo estuvieron de invitadas Morena Rial y Luisa Albinoni. Morena vino con dos o tres amigos. Y Luisa vino sola y no pasó por camarines”.
DE BRITO CONTÓ QUÉ HIZO AMÉRICA CON LAS VÍCTIMAS DE LOS ROBOS EN LAM
Envuelto en la explicación de este hecho delictivo, Ángel describió la decisión, loable, que tomó inmediatamente América para con las víctimas. “El canal se hizo cargo de la situación, sin ninguna investigación y le devolvió el dinero a las chicas”, exteriorizó.
Así como agregó: “El canal nos había pedido que no lo hagamos público, porque siempre se sospecha de gente equivocada, nunca de un invitado, sino de los trabajadores, nos habían pedido precaución de contarlo, pero se hizo público por los colegas”.