La joven artista se encuentra atravesando un gran momento tanto en lo personal, ya que está de novia con Rusherking, como en lo laboral proyectando en su carrera artística. Sin embargo, y tal como ella misma explicó, no fue nada fácil el camino hasta este presente fortuito.
Sincera, frontal, con carácter y personalidad, Angela Torres reveló en medio de una entrevista que hay una etapa de su vida de la cual se arrepiente tanto por quemar etapas como por haber confrontado a su madre, la actriz Gloria Carrá.
En diálogo con el Pollo Alvarez, la sobrina de Diego Torres, quien dió sus primeros pasos en Patito Feo con tan solo 7 años, lanzó: “Creo que ahora me di cuenta cómo quemé etapas. Antes no me pesaba eso y ahora digo ´Claro, no hay vuelta atrás´.
“En donde más flasheé fue que me fui a vivir sola a los 16 años. Ahora digo ´¿Qué? Estaba loca´. Mi mamá vive en zona norte y yo estaba trabajando mucho, haciendo muchos proyectos a la vez por acá por el centro y yo ya hacía todo sola a los 16 años, iba, venía, estaba en la mía y no me quedaba cómodo. No tenía sentido para mí hacer una hora de viaje ida y vuelta sin tener auto”, continuó.
ANGELA TORRES TIENE MUCHO CARACTER
Asimismo, Angela reconoció: “No me llevaba bien con mi mamá tampoco. Entonces fue tipo ´Che, ¿Sabés qué? Mamá, hasta acá. Me voy, ya está, soy independiente. Trabajo hace un montón, me voy a vivir sola´. Me fui a vivir sola a los 16 años y ahora digo ´Que fiaca´ porque hace un montón de años que vivo sola y que me independicé en ese sentido”
“Y me queda toda la vida por delante. Hubo un momento de la vida, a los 23, en el que dije: ´¿Vuelvo a vivir con mamá? No tengo nada que perder´. Pero después dije: ´No, tengo todo que perder. Mejor no, me empiezo a llevar bien con mamá, me quedo a la distancia”, profundizó.
Luego de blanquear sus peleas con Gloria Carra, su madre, la novia de Rusherking sumó: “Siempre hablo de esto sin vergüenza y sin miedo porque siento que es lo más normal del mundo. Con mi mamá nos matábamos, nos costó mucho entendernos, lo cual hace que hoy lo vea re raro porque hoy la veo a mi vieja y me veo re parecida a mi mamá”.
“Somos amigas hoy y nos re entendemos. Por suerte, estamos sanando y pudimos sanar un montón de cosas, haciendo terapia individualmente y también sincerándonos y teniendo esas conversaciones que a veces son incómodas de tener, pero que a la vez son muy necesarias para poder seguir adelante y dar vuelta la página”, remató.
