Para la China Suárez, 2021 será por siempre un año memorable y por diversos motivos que no son todos buenos. Porque no cabe duda de que estos doce intensos meses fueron muy movidos para la actriz, que pasó a estar en el ojo de la tormenta por temas varios.
En su balance del 31 estará la crisis con Benjamín Vicuña, una relación que este año se fue enfriando cada vez más hasta que terminó, en agosto y de manera abrupta, con un comunicado del actor en sus redes. Situación amarga, pero no tan fuerte como la muerte de su amiga Sofía Sarkany.
Del lado bueno de la balanza, la China cumplió su sueño de ser la dueña de la casona de campo en Chacras de Murray. Esa compra que, dicen, era “un caprichito” de la actriz que, apenas concretada, le dijo al chileno que ya no lo quería, lo que le valió la bronca de su ex suegra.
Laboralmente también fue un gran año para ella, que voló a Madrid para grabar una película con Álvaro Morte y seguir desde el Viejo Mundo su affaire (fallido) con Mauro Icardi. ¿Vamos a repasar acá el Wandagate? Para nada, hay material de sobra sobre este culebrón escandaloso que pueden releer en este portal, sobre todo.
Sigamos: además, se estrenó la serie Terapia alternativa y le puso la voz a una película animada, Sing 2, y cobró un buen fee en dólares por la entrevista que le dio a Alejandro Fantino. Por todo eso y mucho más, y a pesar de que por estos días se accidentó en su pileta, la China salió a festejar con amigos a pleno por la noche porteña.
“¿Cómo esperás el 2022?”, preguntó Eugenia a sus seguidores de Instagram, al compartir una postal de la noche en la que se la ve a pura risa, en la mesa de un restaurante en el que hubo mucho vino, cerveza y diversión compartida. Un posteo en el que, sin embargo, limitó comentarios.
Luego, en sus historias, Suárez se mostró cantando muy feliz y sonriente una parte de “Me maten”, tema del español C. Tangana que se hizo famosísima por su excelente Tiny Desk. Con karaoke, complicidad y mucha buena vibra; así se despide la China de este año agridulce.