El Cantando, además de un certamen de canto donde se pone a prueba el talento, desata una guerra de egos. Al igual que lo fue el Bailando, la pista sirve de marco para sacar a relucir el prestigio, la fama y la popularidad de cada artista. Y cada uno lo hace valer a su manera…
En ese contexto, se supo que la modelo Karina Jelinek (39) goza de algunos privilegios a los que otros participantes no logran acceder. Lo reveló la cronista de Los Ángeles de la mañana, Maite Peñoñori, en un móvil con Ángel de Brito.
“Muchos participantes fuera del aire, porque en cámara no lo quieren decir, se quejan de que a todos les hacen el protocolo rápido de que tienen que ir a peinarse donde está el Cuba, el peinador”, comenzó la movilera.
“Pero que con Karina se hace la excepción de que va el Cuba donde está ella”, lanzó inesperadamente. “Se preguntan por qué se le permite eso a Karina, que es medio de diva”, agregó echando leña al fuego.
“Pero que con Karina se hace la excepción de que va el Cuba (el peinador) donde está ella", reveló Maite.
Pero eso no fue todo. Además, contó que Karina cuenta con otros privilegios antes de pisar la pista junto a Manuel Victoria: llegar al canal acompañada de su guardaespaldas, Dani, la muerte y estar acompañada por su íntima amiga, Flor Parise.
“No sólo eso, está Flor todo el tiempo con ella. Hay una imagen en la que se ve que Flor sube al camarín con Karina”, dijo Maite destapando así la olla de los privilegios con los que cuenta la modelo y de los que no gozan ninguno de los otros participantes.
A pesar de las concesiones que se le otorgan, la noche de jueves Karina no brilló y eso la angustió. “No fue mi día ayer. No me puedo dormir, les juro que canté bien en el ensayo”, confesó en su cuenta de Twitter después de haber recibido pésimas devoluciones por parte del jurado.