Natalie Weber encontró el amor para toda la vida con Mauro Zárate y así juntos construyeron una familia hermosa. La modelo logró también crearse en un lugar en el medio, con su más reciente participación en el extinto ciclo Incorrectas.
A partir del talento descomunal del futbolista, la pareja habitó varios países del mundo como Inglaterra, España y Qatar. De vuelta a suelo argentino, se instalaron definitivamente en un paraíso, a partir de la adquisición de una mansión fastuosa en un country en Tigre.
El medio Ricos y Famosos encontró una gama muy variada de documentos fotográficos de esta casa, que permite divisar en detalle todo el lujo que rodea al día a día de Natalie y Mauro. Una casona emplazada en un terreno de 1400 metros cuadrados, con un casco habitable de 500 metros cuadrados.
La ubicación, la extensión, la calidad de la construcción, los detalles brillantes, el espacio arbolado, la salida al lago y demás factores generan que la casa posea una valuación de 2 millones de dólares, nada más y nada menos.
En cuanto a las particularidades de la mansión, se destaca el jardín inmenso, en el que hay plantas, flores, una cancha de fútbol y principalmente un muelle directo al agua. Ese exterior que Natalie aprovecha para generar muchos contenidos para sus redes, ya sea jugando con los perros o tomando una merienda.
Esa conexión con la naturaleza no pasa desapercibida para la familia Zárate, dado que suelen realizar varios deportes acuáticos, como remar en las aguas del delta.
En cuanto al interior, sobresale el cuarto principal de la pareja, que no se priva de nada. Ahí cuentan con un vestidor doble, un balcón con vista, baño en suite, también una salida al gimnasio y un amoblamiento europeo de la más alta gama.
Otra de las peculiaridades de la casona se halla en la instalación de cámaras de seguridad en todos los ambientes, con sensores de movimientos. Que suelen estar acompañadas por aromatizadores exclusivos para cada espacio.
En cuanto a los dormitorios para los niños, se ve en las fotos el de la pequeña de 8 años, con muy linda decoración, peluches gigantes, alfombras, escritorio, baño privado y un acceso por un pasillo lleno de cuadros.
Dentro de toda las excentricidades, solamente el cuarto de huéspedes es un poco más humilde. Con una cama doble estándar, cortinas sencillas y un baño normal.
Fotos: @ricosyfamososok