En 2012, doce años atrás, Benjamín Vicuña y Pampita vivieron lo más duro que les pudo tocar: la muerte de su hija Blanca, al regresar de unas vacaciones en México. Los años pasaron y cada uno elaboró la pérdida de su primogénita a su modo. En el caso de Vicuña, el actor encontró refugio y catarsis en la escritura.
El chileno escribió un libro dedicado a Blanquita y el 8 de cada mes publica sentidos posteos y fotos inéditas en sus redes recordando a la pequeña que hoy sería una adolescente. Y en diálogo con Implacables (El Nueve), el artista se explayó en el sentido que para él tiene compartir sus sentimientos en redes.
“Lo hago en mi intimidad”, dijo Benjamín, sobre la escritura, y distinguió su actividad en IG: “En el caso de los posteos, mantengo como un vínculo epistolar con mi hija, con Blanca, que hay una decisión de hacer esto público a través de las redes”.
Y Vicuña explicó por qué lo hace, puntualmente, cada mes: “Es recordar, es luchar contra el olvido, es generar conciencia y recibir amor. A veces, a las redes las tenemos bastardeadas por todo el hate que hay, pero también hay amor, hay comprensión, empatía y sentido común”.
En esa dirección, el ex de Pampita aclaró que cada vez que sube algo de Blanca recibe mucho cariño. “Las cosas que recibo, es algo muy bonito, que le da sentido a todo. Tener un rol que genera empatía y puede generar empatía con la gente”, destacó, haciendo lagrimear a Susana Roccasalvo.
EL EMOTIVO POSTEO DE BENJAMÍN VICUÑA A DOCE AÑOS DE LA MUERTE DE SU HIJA BLANCA
El día del aniversario número doce de la muerte de Blanca, Benjamín compartió un sentido texto dirigido a su niña. “Blanca. Hoy enciendo una vela y tu imagen se activa, es la manera que tengo de darle vida a una foto. Veo la profundidad de tu mirada, como si en ese instante me hubieses querido decir algo más. Veo tus ojos en paz y con algo de tristeza, con una mariposa en la cara que lo dice todo”.
“Nuestras sombras son bellas. Honrar la vida es recordar a nuestros viajeros. El encuentro del día y la noche. El silencio responde cada una de las preguntas y en ese silencio habitas, mi niña amada”, cerró Vicuña, su dulce homenaje.