En las últimas días, Bake Off se llenó de rating y de escándalos mediáticos. Desde denuncias de fraude porque Samanta Casais y Agustina Fontenla habrían transgredido el reglamento hasta videos donde se filtraron adelantos y definiciones sacudieron la estructura del realitie tanto como sus excelentes mediciones, con las que derrota a Jorge Lanata, nada menos.
Christophe Krywonis es jurado del programa que despertó el interés de "medio país", donde reposteros "supuestamente amateurs" compiten para ganar el título de "gran pastelero argentino".
Como tal, y por haber participado en otros certámenes muy parecidos (Mastercheff, por ejemplo, donde se hizo muy conocido), es una voz autorizada para hablar del lío que se armó alrededor de los competidores y de varias situaciones que se dieron en torno a las pruebas.
En su cuenta de Twitter, el cocinero francés aprovechó la pregunta de una usuaria para dar a conocer su opinión sobre los embrollos. "Paciencia, todo se va a aclarar" pidió el hombre que fue vinculado sentimentalmente con Iliana Calabró.
"Toma tiempo examinar bien cómo son las cosas. Es imposible que el canal y la producción tomen decisiones tan serias de un día para el otro" agregó frente a la inquietud de una seguidora.
"El programa es muy bueno. Es lo más importante y está bien que lo siga viendo tanta gente" remarcó Christophe en una línea argumental parecida a la que utilizó la conductora del ciclo, Paula Cháves.
Hasta allí tranquilo y sereno, el chef galo perdió la compostura frente a una persona que comparó lo que sucede en Bake off con las sospechas que se ciernen sobre la transparencia de la política y los politicos argentinos.
"Mirá que he leído mensajes duros, pero lo tuyo es una imbecilidad absoluta" pegó Christophe. Bake Off, más caliente que nunca.