El 25 de noviembre del 2020 quedará guardado en la memoria de todos los argentinos, y por qué no de todo el mundo, como el día más triste de la historia del fútbol; y es que con tan solo 60 años Diego Maradona falleció a causa de un paro cardio respiratorio.
Muchas fueron las repercursiones que surgieron en su entorno, desde los médicos y personal de la salud, sus familiares y hasta los miles de fanáticos que salieron a la calle a demostrar su amor incondicional por el exfutbolista y también, a compartir lágrimas y palabras de consuelo.
No obstante, más allá de las grandes diferencias que tuvieron durante estos años que también los obligaron a cruzarse en Tribunales, Claudia Villafañe fue una de las primeras en acercarse al country de Tigre en donde estaba residiendo Maradona.
Teniendo la facilidad de poder viajar rápidamente, ya que tenía el día libre de las grabaciones de MasterChef Celebrity, la empresaria se subió al auto junto a sus dos hijas y salió disparada hacia el barrio cerrado, en donde un vecino presenció todo el movimiento.
A tan solo unos minutos de que la información sobre el fallecimiento del director técnico de Gimnasia y Esgrima de La Plata saliera a la luz, Pablo, un residente cercano a la casa de Diego contó en una nota con ElTrece lo que vio desde su domicilio: “Claudia bajó corriendo del auto, con Gianinna y Dalma, obviamente”.
Además, el residente del country San Andrés relató que había una docena de ambulancias, varios móviles de la policía y que tiempo antes de conocer la noticia, un profesional que vive en el barrio se acercó hasta la casa de Maradona: “Un médico del barrio fue a ayudarlo, igual él estaba controlado las 24 horas. En media hora cayeron las ambulancias”.
Por otra parte, Pablo también confesó que era “más que seguro” que el abogado Matías Morla ya haya arribado al domicilio y explicó que dentro del country, Diego era muy querido por todos los vecinos: “El barrio lo apreciaba mucho, muchas familias tenían cuadros de él y lo dejaban en la vereda para que él los vea cuando pase. Pero lo tomaron como un vecino más, respetándolo”.
