Patricia Sosa es una mujer creyente, católica, pero antes que nada una artista. En su paso por el programa de Mirtha Legrand, ahora conducido por Juana Viale, la cantante recordó el día que fue al Vaticano a cantar frente al Papa Francisco y la emoción que le causó la ceremonia.
“A mí me pasó algo en el Vaticano, yo fui en el Día de la Virgen de Guadalupe el 14 de diciembre. Ese día canté con el Papa al lado mío, fue el primer recital de la historia que se hizo fue ese día", comenzó.
"Yo me puedo poner nerviosa para hacer una tortilla de papas, pero para cantar no. Estaba ahí y empecé a temblar, las manos me transpiraban y se me empezó a pegar la lengua con la encía y temblaba el plexo”, afirmó.
“A las 18 horas empieza a cantar el coro de la capilla: 5 mil personas adentro y la Plaza estaba repleta. Yo estaba parada al lado de donde da la misa el Papa y me empieza a temblar todo. El coro que cantaba, abren las puertas del pasillo central y entran caminando 800 obispos. Era como ver El código Da Vinci. 5 cardenales alrededor del Papa, cada vez se acercaban más”, recordó.
“Cuando lo tengo en frente, me mira , me guiña el ojo y levanta el pulgar. ¡Peor! Me emocione. Nudo en la garganta. Se acerca un cura y me dice que me ve un poco inquieta, pero que tenga en cuenta que nos están viendo miles de personas. ¿Que hice? Meditación y respiración. Y me pude comunicar con el altísimo y le dije: ‘Dios mío, si me trajiste hasta aquí, asistime’”, contó.
“El Papa dio su misa y la sentí. Yo sentí que la voz salía perfecta y yo era solo un canal porque estaba temblando. De a poco me fui tranquilizando porque sentía que cada vez salía mejor. Cuando termine de cantar toda la obra el Papa tenía que irse y se paró delante mío y me dijo gracias. La vi a mi hija y a mí mamá y me largué a llorar. Los guías están siempre, tenemos que molestar y hablarles”, terminó.