Gran Hermano vivió uno de los sustos más grandes en lo que va del programa. La salud de Juliana Furia Scaglione dejó en shock a todos los hermanitos y sus fanáticos, sobre todo luego de lo que fue su salida al Hospital Alemán.
Allí a Furia debieron someterla a estudios, recordando que tenía una infección urinaria, un primer estudio de sangre que salió mal y el resultado que alertó a los médicos. En medio de especulaciones y preocupación, la doble de riesgo aseguró que estaba esperando a que le confirmaran si tenía o no leucemia.
Aunque Santiago del Moro aseguró que para el viernes o sábado se sabría lo que tiene, hasta el momento no fue informado pero eso no quita que ella sí esté al tanto. Y la que en las últimas horas aportó nuevos detalles de la salud de Juliana fue Marcela Tauro.
Por lo que contó la panelista en Intrusos, el consejo médico que le dieron a Furia es que debía seguir en observación por unos días, es decir, quedarse internada, pero que la participante del reality se negó a dicha petición.
"Estaría haciéndose los estudios en el Hospital Alemán, allí habrían determinado ya el diagnóstico que no voy a decir, sería lo correcto. Según los médicos la quieren dejar internada y ella no quiere", deslizó Tauro en el programa de América TV.
POR QUÉ FURIA SE NEGÓ A QUEDARSE INTERNADA
Recordando que su parte médico arrojó datos preocupantes y que ni se imaginaban desde la producción, la preocupación empezó a crecer. Pese a que no quedó internada, lo cual era ideal, su salud por el momento no está en riesgo y podría volver a salir de la casa en caso de ser necesario o tener que comunicarle alguna noticia.
“En el parte diría: deshidratada, con hematomas y pérdida de masa muscular", sentenció Tauro. Su hermana mayor Coy, es quien estuvo siguiendo el minuto a minuto de su salida al médico e incluso llegó a estar a una puerte de distancia de Scaglione, quien en todo momento cumplió el aislamiento.
