El Polaco y Barby Silenzi transitan por días de mucha felicidad, a partir del nacimiento de Abril, la primera hija de la pareja. Los dos se muestran embelesados, radiantes de alegría por todo lo que aporta a un hogar la llegada de un bebé.
Justamente, a partir de todo lo que publican el cantante y la bailarina en sus redes sociales se logra percibir las tremendas comodidades de la casa. El nido de amor de esta bella pareja está emplazado en un country de la zona sur del Gran Buenos Aires, más precisamente en la localidad de Berazategui.
Como todo barrio privado, prevalece el verde, los espacios enormes, la seguridad y tranquilidad, hasta la posibilidad de contar con un lago que adorna la vista.
La familia ensamblada que construyeron El Polaco y Silenzi, a partir de los hijos que ya tuvieron con otras administraciones, no tiene problemas de privacidad y lugares personales. La amplitud de toda la casona ayuda a que cada integrante disponga de todo lo necesario para pasarla bien.
La casa se destaca por un living enorme, que fue fusionado con la cocina a través de una serie de aberturas en la pared, que terminó por edificar una serie de columnas. Con mucho blanco en las paredes, acompañado por el gris, ese ambiente reluce por los enormes ventanales que comunican con el jardín.
Justamente, en el fondo de enormes extensiones aparece una pileta confortable. Así como juegos infantiles espectaculares, para que todos los gurrumines se entretengan a lo grande.
Pero eso no es todo, los otros espacios van ganando personalidad con la decoración, como la habitación del Polaco, que posee una ornamentación muy romántica, con el plateado como predominante y un sommier gigantesco.
Como si fuese poco, el cantante logró armarse un bunker muy especial. Claro, su pasión por la música lo motorizó a generarse su propio estudio, donde instaló una batería acústica, así como un teclado. Además, en los muros colgó todos los discos que editó y una foto grande con Diego Maradona.
En definitiva, El Polaco y Barby tienen todo lo necesario para no aburrirse, para disfrutar de la familia y para no caer en el tedio de la mayoría de los ciudadanos en este aislamiento.
