Romina Yan, la hija de Cris Morena (63), murió en el mes de septiembre 2010, cuando su mamá se encontraba en la cresta de la ola produciendo obras de teatro y programas de televisión. Su papá, Gustavo Yankelevich, también pasaba por un momento laboral espectacular.
Ella, en tanto, criaba a sus hijos y miraba su trabajo en la tele ya medio de costado. Lo suyo era la familia. Pero una tarde de semana, al salir de hacer gym en la zona de San Isidro, se desplomó y en el hospital de la zona no la pudieron reanimar. Se había ido para siempre muy joven a los 36 años.
En PH, Podemos hablar, el programa de Andy Kusnetzoff, Cris contó varias anécdotas de romina, pero la que más llamó la atención fue en el punto de encuentro, donde tuvieron que pasar aquellos invitados que recibieron señales de los que ya no están con vida.
“Es una me pasó hace cuatro días, muy fuerte. Yo creo que Romina está en las mariposas y los colibríes. El colibrí es un pájaro de sanación, me impresiona ese pájaro mariposa que no se sabe cuándo se detiene”, dijo Morena.
"Lo quise agarrar hasta que lo agarré. ¡No te puedo explicar lo que me pasó! No te lo puedo explicar…", dijo Cris.
“Estoy en la mesa de casa, escucho un ruido raro y veo que se metió un colibrí en casa, estaba entre la ventana y el roller. Lo quise agarrar hasta que lo agarré. ¡No te puedo explicar lo que me pasó! No te lo puedo explicar… La toqué, la tenía ahí”, afirmó.
“Le pude sacar una foto para tenerla siempre. Dicen que es muy difícil agarrar un colibrí. Se dejó agarrar, ¿entendés? Lo llevé afuera, lo solté y dije 'gracias hija'. Sigue viniendo pero no entra. Tengo millones, deténganse porque lo no manifestado nos sostiene todo el tiempo”, terminó.
