Dentro de la gama variopinta de personalidades que pulularon por el interior de la casa más famosa de la televisión, el más recordado y reconocido es Cristian U, sin lugar a dudas. El hombre que conquistó la edición 2011 de Gran Hermano trascendió fronteras y ahora quebró el misterio al contar su gran estrategia.
El retorno del reality a la pantalla chica exacerbó la atención del público y revivió el frenesí por esta competencia tan singular. El mediático oficia de analista, a partir de las virtudes de sobra que posee en su bagaje, y se destaca todas las noches en el panel de Santiago del Moro.
En una visita al ciclo de Georgina Barbarossa, Cristian sorprendió al describir un secreto guardado bajo siete llaves y que refiere a su carta más oculta, a ese detalle que lo llevó a la cima, a dominar el juego y culminar como el ganador más mítico del reality.
“Yo manejaba los votos de Gran Hermano...", empezó en su confesión y luego añadió más especificidades: “Entraba al confesionario, agarraba el Twitter y decía 'chicos voy a hacer que queden nominados tal y tal' y 'quiero que se vaya tal'. Y cada uno que yo decía que se iba, se iba”.
Hasta que remarcó la circunstancia decisiva, el dato jamás antes revelado: “Además yo tenía un infiltrado en el otro grupo". ¡Wow! Conmoción total en el estudio, ya que no se sabía esta información, a la que Cristian le puso nombre y apellido: "Martín Pepa, que era el infiltrado del otro lado, me contaba todo”.
Respecto al pacto espurio que selló con su compañero de encierro, el famoso contó: “Yo le prometí, porque tengo palabra, que lo iba a llevar a la final. En qué puesto no importa, pero se lo prometí y cumplí". Y así narró un episodio fundacional para su triunfo: "Un día viene y me dice 'los 10 van contra vos'. Listo, esa autonominación de ese día fui para atrás y quedaron los otros diez autonominados y yo no".