Catalina protagonizó un nuevo escándalo en Gran Hermano. Y es que la jugadora se metió con un tema súper delicado: la comida de Tato. El uruguayo contó cuando ingresó que tiene una condición que no le permite consumir gluten, y ella decidió jugar con fuego.
Tato preparó brownies sin TACC junto con Luz y Lucia para poder compartir con toda la casa, pero Gabriela subió la temperatura del horno, hizo que se quemaran y Cata no dudó en sumarle algo más y fue por comino. Mientras tanto, Lourdes vigilaba.
El Big se molestó, y decidió ponerle los puntos: “No soy su papá para decirles cómo deben comportarse, pero hay cosas con las que no se juega: la comida. Pueden haber trastornos leves o severos. Y lo que empieza como un chiste puede terminar en un hecho lamentable”.
“Cata, en estos días observé que jugás al límite en la casa. Pero esto que hiciste con la comida, no voy a dejarlo pasar”, lanzó Gran Hermano. Fue entonces que la pediatra no solo perdió el beneficio de líder sino que también logró que Tato sea el nuevo líder de la semana.
LA TERRIBLE JUGADA DE CATALINA
Obviamente, el público no se quedó callado. En redes sociales hubo una catarata de mensajes que pedían expulsión inmediata. Algunos usuarios escribieron que “jugar con la salud no es estrategia”, y otros hablaron de “una falta de respeto total”.
Mientras tanto, Catalina se mostró tranquila. La pediatra decidió pedirle disculpas a Tato y en el confesionario volvió a a hacerlo dejando en claro que está arrepentida de lo que hizo y reveló que se hace cargo del castigo que recibió.
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