La familia Montaner transita por un periodo de extrema visibilidad, de escrutinio de millones de personas y sobre todo de los medios de comunicación. Los rumores se acumulan en torno al clan y a las particularidades de la dinámica de ese grupo sanguíneo.
La boda de Stefi Roitman y Ricky Montaner maximizó la lupa sobre la familia, por un sinfín de aristas, que van desde la fortuna que invirtieron para el evento, que se estima de más de un millón de dólares, así como por el misterio de realizarlo en Argentina y no en Miami.
Ni hablar de los datos que salieron a la luz en las últimas horas, que refieren a que Ricky y Stefi todavía no se casaron legalmente, lo que se enrola en otro mecanismo más controversial. La teoría de esta ausencia del trámite se vincula con el deseo de obligar a la influencer argentina a firmar un contrato prenupcial.
Y en todo ese ruido, cobró mucha fuerza el rol de Marlene Montaner en el entramado familiar. Ese foco se disparó con la extraña actitud de la esposa de Ricardo de acudir a la boda vestida de blanco, lo que se entiende como una maniobra para incomodar y opacar a la novia.
Desde ahí se analizó cómo es la dinámica del clan y sobre todo un lazo muy tenso entre Marlene y Stefi, que se remontaría a un tiempo extenso. Estas presunciones no pasan desapercibidas para Ricardo, que ya ha ejecutado respuestas furiosas en sus redes sociales.
Casualmente, el cantante posteó una foto de su esposa al lado de su hija Evaluna y escribió: "Amada Marlene, tanta vida viene de ti, de tu panza, Eva y de su panza, Indigo. ¿Cómo habré de agradecer esta infinita fortuna?". Lo que se lee como una respuesta a las críticas, a los cuestionamientos.