Las aguas están bastante caldeadas en Gran Hermano. Es que tantos meses de encierro sumado a la ansiedad de la final que se aproxima y el deseo de llevarse el primer lugar en el reality hace que los participantes empiecen a chocar, discutir e incluso sensibilizarse hasta las lágrimas.
Y así como suele pasarle, y de hecho se vio, a Virginia Demo en lo que va de su estadía en la casa, quien ahora rompió en llanto fue su hija Delfina indignada y dolida por la actitud de Lucia Maidana tras su visita fugaz, esa que permitió la producción el lunes 27 de mayo.
Si bien podría haber dejado pasar lo sucedido y restarle importancia, la joven no pudo evitar sentirse mal por eso y no solo lo compartió con su madre y Flor Regidor sino que además se quebró al contar lo que le provocó el desplante de la ex hermanita.
“Me da bronca que venga una piba, en la que entre, nombre a todos, no me nombre, me conoce”, comenzó Delfina movilizada por lo que ocurrió horas atrás y, en complicidad con sus dos compañeras, siguió: “¿Entendés? Porque eso marca algo adentro y afuera”.
DIAS DE ANGUSTIA PARA LA HIJA DE VIRGINIA
A lo que, intentando consolarla y sacarle esa idea de su cabecita, de que por algo la ninguneó así Lucía, Demo le dijo: “¿Quien? ¡Pero tan importante es? Dejame de hinchar los huevos”. Siendo que estaba presente en la charla, Flor acotó: “¿Pero quién es? ¡Dale!”.
Retomando con su discurso para levantarle el ánimo a Delfina, la standapera lanzó: “¿Quién entro, boluda? ¿Susana Giménez? No entró Santi del Moro y te miró con cara de ojete y te ignoró. Claro”. Acostumbrada a ese tipo de desplantes, habladurías y críticas de sus pares, Virginia pretendió que su hija no se enroscara y finalmente le sacó una sonrisa.